Mikel Landa, tercero en el pasado Giro de Italia, califica de «exagerada» la repercusión que ha tenido el hecho de que en el podio del Giro se le olvidara quitarse la gorra cuando sonó el himno español en honor del vencedor Alberto Contador. «Fue un despiste, tenía la cabeza en otro sitio y pido disculpas si alguien se sintió ofendido« reconoció a su llegada a España.
Por otra parte dijo que espera encontrar «sitio en las grandes vueltas» y fija su próximo reto en la Vuelta a España. «Después del nivel que he tenido, no puedo perder el tiempo y creo que tengo que centrarme en las grandes vueltas y sobre todo disputar y aprovechar al máximo cuando estás bien», señaló el ciclista vasco del Astana, en declaraciones ofrecidas por su gabinete de prensa.
Y afirma que no le asusta la responsabilidad adquirida tras su explosión en la gran ronda italiana. «Ser uno de los candidatos a hacer podio o acabar entre los cinco primeros, va a ser una presión, pero la llevaré encantado».
Apunta cuándo empezó a pensar en la posibilidad de terminar en el podio de Milán «después de la contrarreloj de Valdobbiadene tras ver que no salía de los diez primeros de la general». Eso sí, no pensó en arrebatarle la victoria al líder del Tinkoff ruso. «Alberto es Alberto, aunque tenga un bajón no se va a hundir nunca, porque controla muy bien los tiempos».
Una prueba de la que se ha enamorado y será «mi carrera favorita de lejos».
Entrevista Radio Euskadi (mp3)