El presidente de la UCI, David Lappartient, está preocupado por la renuencia a cambiar parte de los equipos de ciclismo, y quiere avanzar en el tema de los auriculares o limitar, aún más si cabe, el número de corredores por competición. También señala la presión de los equipos más poderosos porque todo se mantenga como hasta ahora.
En una entrevista al máximo mandatario del ciclismo mundial realizada por Clément Guillou, enviado especial a Laussane por el diario francés Le Monde, el presidente francés expone una preocupación que a ningún presidente de ninguna federación deportiva le gustaría afrontar: ¿cómo reavivar el interés en su deporte?. Después de la experiencia de un último Tour de Francia soporífero, la Unión Ciclista Internacional (UCI) está tratando de resolver este incipiente problema, a su juicio, impulsado por unos organizadores que con unos recorridos conservadores bloquean la carrera para que todo pueda decidirse en las últimas etapas.
En febrero, anunció la creación de un «grupo de trabajo para hacer atractivas las carreras», que se reunirá el próximo junio. Ya en el pasado Mundial celebrado en Innsbruck, explicaba que las pistas previas que había podido valorar hasta entonces eran numerosas y tenía la intención de mostrar valor político de cara al desarrollo de sus ideas, a pesar de la hostilidad de muchos de los actores alrededor de la bicicleta.
-¿Es la visualización del último Tour de Francia lo que lo hizo consciente de la necesidad de tener un think tank (grupo de reflexión) sobre el atractivo del ciclismo?
Tenemos grandes carreras pero el guión no está escrito de antemano. Está claro que, especialmente en la carrera más grandes del mundo, nos aburrimos todos un poco. Las espectadores observan el deporte durante períodos más cortos, necesitan sentir que algo está sucediendo.
Muchas personas del mundo del ciclismo me dicen: «¿Dónde quedan corredores como las grandes figuras de nuestra juventud? ¿Dónde está la incertidumbre?«. Cuanto menos se escriba el guión por adelantado, más lo verá la gente y mejor será para la economía de nuestro deporte. Si se te hace pesado seguir una carrera, dejas de verla.
Todos hacen esfuerzos, veo cómo Christian Prudhomme (mandamás del Tour) traza el recorrido. Pero el problema es multifactorial. No hay una razón y todas son inseparables: presupuestos, sensores de potencia, auriculares.
-¿Quién se sentará en este comité de reflexión?
La idea es tener un representante de los organizadores, los corredores, los equipos, la UCI, los periodistas y los canales de televisión. Nos gustaría comenzar en junio para poner las cosas en su lugar la próxima temporada.
-Después de pasar de nueve a ocho corredores en las grandes vueltas, de ocho a siete en el resto, ¿podemos considerar reducir aún más el tamaño de los equipos?. Romain Bardet propuso durante el invierno pasar a seis corredores por equipo en el Tour…
Dentro del Consejo Profesional de Ciclismo, existe un consenso entre los distintos actores que lo componen para no reducir su tamaño. Los equipos, al menos los que ahí están representados, quieren continuar igual para poder controlar la carrera; Los corredores, porque temen por su trabajo y por ende su salario; los organizadores, porque al invitar a 25 equipos de seis corredores significaría mover más infraestructura que por 22 equipos de ocho.
Sin embargo, este es un tema debe ponerse sobre la mesa. Un equipo grande puede controlar la carrera con ocho como lo hizo con nueve, pero con seis… Por lo tanto no desterremos del todo esta idea.
Hay temas que necesitan ser enfatizados, es una cuestión de voluntad política. Todos nos dijeron que sería imposible prohibir el Tramadol, lo hicimos. Lo mismo ocurre con los corticosteroides: es complicado técnicamente, financieramente, legalmente, pero se implementará en 2020.
Por eso no quiero que las «familias» del ciclismo sean las únicas participantes en este comité. También necesitamos la opinión de los que adquirieron derechos de explotación, patrocinadores, porque tal vez nos puedan decir algo beneficioso antes, por ejemplo, de que dejen de emitir carreras en directo o cómo cambiar el formato para hacerlo más interesante. La audiencia de la carrera es un tema que continuamente está en boca de los emisores, especialmente en el Tour de Francia.
-Los organizadores del Tour desean prohibir los auriculares. Qué opina
Nunca he sido favorable a los auriculares, los hemos prohibido en los campeonatos mundiales, la carrera que organiza la UCI. Los equipos, al contrario de lo que pueden creer, tienen todo el interés en tener más carreras desenfrenadas. Habría más atractivo para el ciclismo, un aumento de valor e incremento del patrocinio.
Entiendo que el Sky (INEOS) quiera continuar controlando las carreras porque gana. Pero querer dominar algo que nadie está observando, no tiene sentido. Estos equipos a veces están en su mundo y olvidan que el espectáculo no es para ellos, sino para el espectador.
-¿La oposición a la prohibición de los auriculares proviene también de algunos corredores?.
El argumento de la seguridad a favor del mantenimiento de la radio es extraño: en el automóvil está prohibido telefonear, en la motocicleta también. Las caídas están particularmente relacionadas con la presencia de los auriculares que pueden generar una falta de atención.
Si el argumento es que el anuncio de los peligros en la carretera, el anuncio de caídas o la situación de carrera, podemos configurar un equivalente de «Radio Tour» para los corredores, la misma información para todos. Pero no hay instrucciones aún.
Otra solución es permitir la transmisión de las instrucciones dadas con los auriculares en abierto, como en la Fórmula 1. Lo que también podría cambiar la naturaleza de las conversaciones y, por lo tanto, el interés. Existe una amplia gama de posibilidades: ya sea supresión completa, un Radio Tour o transmisión en vivo.
El Tour también se opone a los sensores de potencia…
Sin un sensor de potencia, los corredores que compiten sin seguir los ataques pueden ser más propensos a hacerlo, en lugar de escalar de acuerdo con sus datos. Desde enero los equipos ya no tienen acceso directo a los distintos sensores de sus corredores. Este sistema existía en algunos equipos y permitió que a algunos directores deportivos manejar la situación a través de directrices emitidas a los auriculares. A partir de ahora el ciclista deberá, al menos, analizar su potencia por sí mismo.
-La mayoría de los corredores piensan que esto no cambiará nada.
Los sensores por sí solos no cambian las cosas. Pero los sensores, más los auriculares, más el número de corredores, hace que todo en su conjunto esté bloqueando la carrera. Siempre las hubo lentas y siempre han existido pero nunca en estas proporción actual.
La otra realidad es la brecha presupuestaria. ¿La equiparación del presupuesto no debería ser una opción? Echemos un vistazo a la Premier League de fútbol. Hay poca diferencia entre el primero y el último en cuanto a la distribución de los derechos de televisión, mientras que en España la brecha es considerable entre el Real Madrid y el FC Barcelona con el resto. En Inglaterra, el nivel es más homogéneo y es bueno para el atractivo del campeonato.
El «tope presupuestario» es por lo tanto un tema a tratar. Algunos equipos están abiertos, otros no, pero no hemos tenido conversaciones importantes por el momento. Los mecanismos no son simples de implementar, pero no es porque sea complicado que no lo hagamos.
Interpretación y traducción realizada por Roberto Tejedor