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Larsen, cuarto por la izquierda, en el Mundial 2017 © instagram
En estos días en que una de las noticias ciclistas más destacadas ha sido el fichaje de los campeones del mundo de pista Sebastián Mora y Albert Torres por Movistar, otro equipo español, aunque más modesto, el Kometa-Xstra, también puede presumir tener un ‘arco iris’ en sus filas, e igualmente conseguido en los velódromos, aunque en categoría junior. Se trata de Mathias Larsen que conquistó la medalla de oro en 2017, la modalidad de madison formando pareja con Julius Johansen, precisamente campeón del mundo en ruta en la categoría juvenil ese mismo año, en Bergen.
Con poco menos de seis millones de habitantes, Dinamarca es un país cada vez más importante tanto en el ciclismo en carretera como en pista. En Yorkshire, Mads Pedersen se colgaba un oro en el fondo en carretera que venía a premiar esa presencia histórica de su ciclismo en primera línea, mientras que en los velódromos, sin alejarnos mucho en el tiempo, basta con recordar las notables actuaciones de la cuarteta de persecución danesa, con Lasse Norman Hansen, Frederik Madsen, Rasmus Pedersen y precisamente Julius Johansen, en las primeras pruebas de la Copa del Mundo de pista, donde estuvo a punto de batir el record del mundo.
Larsen ya había sido subcampeón del mundo de persecución por equipos un año antes de conseguir el título en la madison, e incluso llegó a debutar con la selección absoluta en la temporada 2017-18, en las Copas del Mundo de Milton y Santiago de Chile, donde obtenía una sexta y una séptima posición con una cuarteta experimental, que completaban Matias Gunnar Malmberg, Mathias Wichmann Krigbaum y Kristian Kaimer Eriksen.
Larsen y Sevilla © Kometa
“Comencé a practicar ciclismo en pista cuando tenía trece años”, recuerda el ciclista danés durante la concentración de pretemporada que afronta con el Kometa-Xstra en Oliva, y que se reproduce en la web del equipo madrileño. “Muchos de mis amigos del mundillo ciclista estaban practicando ya entonces en los velódromos y llegó un momento en el que pensé que por qué podía probar a ver qué tal. Así que opté por intentarlo. ¡Me pareció muy divertido! Así que continué haciendo pista”.
¿Y en sus planes está seguir manteniendo esa relación? “Sigo rodando en el velódromo durante el invierno porque creo que es un entrenamiento muy bueno, pero estoy centrado completamente en la ruta. La carretera es mi 100%”, explica, para añadir que la madison es su prueba favorita. “Al final en esa prueba logré el título mundial”. El jersey arcoíris, enmarcado, preside una de las paredes de su casa.
Respecto a su futuro como ciclista de carretera, Jesús Hernández, director del Kometa-Xstra, comenta que “teníamos muy buenas referencias de Mathias como corredor, pero nos ha sorprendido más aún. Es un ciclista muy rápido, tiene una condición física impresionante y mucho margen para seguir creciendo”. Dario Andriotto, segundo director, llegó a competir contra el padre de Mathias, Nicolaj Bo Larsen, durante sus quince años de profesional. “El perfil de ciclista varía, pero físicamente son realmente muy parecidos. Sobre la bici tienen la misma planta. Su padre era un corredor potentísimo, muy fuerte, cuando arrancaba la moto era para todo el día. Que le siguiera quien pudiera”, recuerda Andriotto sobre un ciclista que llegó a ganar una etapa en el Giro de Italia 1996.
