La disputa del reciente Campeonato de España de cyclo-cross en Gijón ha supuesto un hito en cuanto a la cantidad de participantes femeninas: 71, un número récord e impensable hace tan sólo unos años. Y no sólo es la cifra lo que nos debe hacer replantearnos el peso cada vez mayor de la sección de féminas en el pelotón, sino también la cantidad y calidad de la atención que suscitan, tanto entre los medios como entre los aficionados. La tendencia a hacerse eco de los resultados de las féminas va a la alza y es en eventos como un campeonato nacional donde nuestras reivindicaciones adquieren más fuerza.
Así, minutos antes de darse la salida de la carrera femenina se exhibió la pancarta por la igualdad que hemos paseado por todas las carreras de cyclo-cross esta temporada: “Mismo trato, mismos derechos IGUALDAD” . Un aperitivo perfecto para lo que sería más tarde el plato fuerte -extradeportivamente hablando – de la jornada: la reunión que mantendríamos con representantes de la RFEC, entre ellos la presidenta de la Comisión de Féminas Cristina San Emeterio. También estaba presente el seleccionador nacional de cyclo-cross Pascual Momparler y alrededor de 40 corredoras de todas las categorías. También asistieron algunos directores de equipos y representantes de federaciones regionales. La reunión estaba abierta a todas las personas que desde distintos frentes están interesadas en mejorar la situación del ciclismo nacional.
El intercambio, en líneas generales, fue productivo aunque se vivieron momentos de tensión dada la importancia de los temas a tratar. Uno de los momentos álgidos se produjo con el organizador del Cyclo-cross Ciudad de Valencia, presidente de la Federación Valenciana e integrante de la Federación nacional, Amadeo Olmos. Aseguró que se ha solicitado a la UCI la categoría internacional para la carrera de féminas de la temporada próxima. Recordemos que la prueba celebrada en la capital valenciana es tristemente conocida por su trato despectivo hacia la categoría femenina que podemos constatar con hechos año tras año. Así, hay corredoras que en la pasada edición se negaron a asistir en protesta por el trato recibido en ocasiones anteriores. Confiamos en que la reunión haya servido para que en la siguiente edición de esta carrera se nos trate con dignidad.
Otro momento intenso de la reunión surgió con la mención de la inexistente categoría sub-23. Estos campeonatos nacionales no han visto podio en esa categoría. Es más, a su ganadora no se le ha otorgado ni una medalla. Según los representantes de la RFEC, se decidió no hacer podio este año porque en el Nacional de carretera 2014 una corredora se manifestó en desacuerdo con el resultado. Nos parece increíble que se vuelva atrás en un logro obtenido tras años de peticiones tan sólo por la protesta de una corredora y más bien nos parece una excusa para no dar a la categoría el trato que se merece y lograr la igualdad con la categoría sub-23 masculina.
Irónicamente, el mismo día se hace público que en Holanda en 2015 la categoría sub-23 tendrá podio, medallas y ceremonia de premios específicos. Y unos días después también la Federación Francesa de cyclo-cross ha anunciado que la temporada próxima la categoría juvenil tendrá su parrilla separada e independiente de las élite. Como vemos a nivel internacional, el crecimiento del deporte femenino es imparable.
Por otro lado, ya está en manos de Cristina San Emeterio el escrito que explica detalladamente la situación de precariedad del ciclismo femenino en España y donde se aportan las soluciones para mejorarlo. El siguiente paso es acudir a exponerlo el 24 de enero a Madrid a la próxima asamblea de la RFEC. En estos días elegiremos a una persona que nos represente en esa reunión y pese a que desde la Federación se muestren cautos, también nos han hecho saber que las peticiones son factibles, con lo cual creemos firmemente que se pueden aprobar en su totalidad.
Parrillas dignas, reconocimiento de la categoría sub-23, duración de las pruebas, equidad de premios y un trato igualitario son algunos de los aspectos que se detallan en el escrito y que no hacen más que concretar lo que nos parece un derecho natural y que a estas alturas de la evolución social debería de darse sin necesidad de reclamarlo. El encuentro entre corredoras y representantes federativos finalizó cordialmente y con la mirada puesta ya en la meta: un 2015 donde debe ondear la bandera de la igualdad.
Colectivo de Ciclistas Femeninas que Pedimos Igualdad