Poco a poco, la normalidad comienza a regresar a los principales velódromos nacionales, aunque el uso de los mismos sigue siendo bastante restrictivo y con fuertes medidas de seguridad.
En Anoeta ya se puede rodar desde la semana pasada, aunque solamente a los ciclistas de alto nivel (DAN y DAR) y con cita previa que se debe tramitar a través de la Federación Gipuzkoana. No obstante, es posible que se autorice un uso menos restrictivo a partir de la siguiente semana. Lo que no parece nada probable es que se puedan celebrar las pruebas que querían hacerse en el velódromo de cara al regreso a la competición de carretera, ya que la Diputación no ha dado la correspondiente autorización, no parece probable que pueda haber un cambio de postura, a tenor de la ‘luz verde’ que daba ayer el Gobierno Vasco a las competiciones ciclistas, a partir de julio.
Los ciclistas valencianos podrán comenzar a entrenar esta semana tanto en el Luis Puig como en el de San Vicente. En el caso del primer recinto, no hablamos de utilización como Centro Especializado de Alto Rendimiento o Centro de Tecnificación, ya que exige unos protocolos más estrictos; se trata de un uso con unos horarios establecidos, y con el acceso limitado a cuatro corredores en pista y otros cuatro en la pelousse, como selección valenciana. En este enlace de la Fundación Deportiva Municipal se pueden conocer los detalles.
En Mallorca, el Vélodrom Illes Balears, por cierto, también CEAR, se encuentra cerrado -y aprovechando para hacer algunas reformas-, aunque en Palma ya tienen desde mayo abierto el descubierto de Son Moix, que se puede usar con cita previa, y donde están realizando ya entrenamientos tres veces por semana los corredores de la Federación Balear que, por cierto, se mostraron gratamente satisfechos del estado de la pista, que incluso consideraron tan aceptable o más que la de recintos como Galapagar o Tafalla.
Precisamente el Miguel Indurain de la localidad navarra se abre esta semana, también con un estricto protocolo de seguridad, dando prioridad a los ciclistas de la Federación Navarra en cuanto a su uso. Murcia también inicia esta semana los entrenamientos en sus dos recintos -Torrepacheco y Molina-, con reserva de hora, pero con todas las facilidades, mientras que el Narciso Carrión de Valladolid también está abierto, con parecidas medidas en cuanto a limitación de corredores y protocolos de acceso e higiene.
Por su parte, el Miquel Poblet de Barcelona también inicia sus actividades en los distintos grupos de entrenamiento, tanto de selección/tecnificación como a nivel de clubes. Los primeros tendrán reservados dos días -martes por la mañana y jueves por la tarde- respetando las normas y distancias establecidas, con zonas diferenciadas de reposo, calentamiento y entrenamiento y con medidas como tomar la temperatura a la entrada, registrando la lista de participantes en cada entrenamiento y con carriles de un solo sentido para los movimientos.
La instalación que lleva más retraso en estos momentos es el velódromo Tasio Greciano, de Galapagar. El Ayuntamiento, como propietario de la instalación, aún no ha dado autorización para que se utilice ni siquiera de forma restringida -quizá porque la desescalada en Madrid va con más retraso-, aunque desde la FMC, cuya sede se encuentra en dicho recinto y permanece aún cerrada, se confía en que pueda volver a utilizarse en breve, con las lógicas medidas de seguridad.