Domingo a domingo, sentado junto a su padre delante de la televisión, Vincenzo Nibali se iba contagiando del virus del ciclismo mientras veía horas y horas de programas dedicados a este deporte. Salvatore, muy aficionado al deporte del pedal, le inculcó de manera natural su pasión por la bicicleta, pero las escasas oportunidades de competir en su zona hicieron que aquel chaval que más tarde portaría el sobrenombre de El Tiburón, no destacara hasta una edad bastante tardía. Fue a los 17 años cuando comenzó a despuntar sobre los demás, ganando siete carreras en una temporada. Una progresión que se vio confirmada en su paso la categoría junior, cuando en dos temporada (2001 y 2002) se anotaba 19 triunfos.
En 2010 llegó a la Vuelta a España como uno de los grandes outsiders. Había sido Top 10 del Tour de Francia del año 2009 y se había subido al podio del Giro ocupando la tercera plaza sólo unos meses antes. Tenía que confirmar esa progresión y la ronda española era el lugar adecuado. El italiano lo consiguió. Se alzó con el triunfo final y comenzó la que sería una de las grandes carreras de esta segunda década del siglo. Más tarde llegarían las otras dos joyas de su triple corona. Primero, el Giro en 2013 (tras subir de nuevo al podio como segundo clasificado en 2011) y el Tour en 2014 (tras la tercera plaza de 2012).
Este año tenía la complicada misión de defender el título en la ronda francesa, pero aunque acabó la carrera dando muy buenas sensaciones, un mal inicio y un paupérrimo paso por los Pirineos le dejaron sin opción alguna de contestar a un Froome que, salvo por el desesperado intento final de Quintana, tuvo la situación siempre bajo control.
Muy atacante, de ahí su apodo, no ha sido Nibali un corredor que haya necesitado ganar y mostrarse superior a los demás en los días previos a sus mejores actuaciones, pero no cabe duda de que la ausencia de grandes resultados previos no puede suponer un hándicap a la hora de evaluar sus opciones de cara a la Vuelta a España que comienza el próximo sábado.
Sí puede jugar en su contra, sin embargo, la tricefalia que plantea su equipo. Fabio Aru es el jefe de filas teórico. El hombre que, desde principios de temporada, Vinokourov y los suyos designaron para liderar al equipo en la Vuelta. Nibali, que siempre vio en Aru a su alumno aventajado y sucesor, tiene una deuda moral con él. Siempre a su lado, fue parte fundamental en 2013 cuando El Tiburón se llevó el Giro. Han estado juntos en Sestriere preparando su ataque al maillot rojo, pero no pierden de vista a Mikel Landa. El español, que ya sabe que cambiará de aires la próxima temporada, aparece como el tercero en discordia, pero nadie sabe muy bien qué esperar de él.
Nibali, por su parte, se muestra ambiguo. A Landa, ni mentarlo. A Aru, hay que ayudarlo, pero si su pupilo falla o si él ve alguna opción, no dudará en asumir las riendas del equipo. Terreno tiene para hacerlo en una edición de las que le pueden gustar: con mucha montaña y llegadas explosivas. Un trazado apto para corredores valientes y atacantes como él.
No ha vuelto a ponerse un dorsal desde que el pelotón del Tour llegara a los Campos Elíseos, lo que le ha dado oportunidad para descansar y preparar con mimo una carrera en la que, no debemos de olvidarlo, tendrá una nueva oportunidad de demostrar que sí es capaz de doblegar a los grandes ausentes el pasado año en Francia, especialmente a Chris Froome, el inglés que muchos consideran que podría haber superado a Nibali en 2014 de no haber sido por la mala fortuna.
Vincenzo Nibali (Astana) – Italia, 30 años
Días de competición: 57 (9.220 kms)
Victorias: Campeonato de Italia de fondo en carretera (CN), 19ª etapa Tour de Francia (2.WT)
Otros resultados: 10º General final Tour de Romandía (2.WT), 5º Clasificación de la montaña Critérium del Dauphiné (2.WT), 4º General Final Tour de Francia (2.WT)
Clasificación UCI World Tour: 31º
Puesto Vuelta a España 2014: DNS
Mejor resultado Vuelta a España: 1º (2010)
Días de líder Vuelta a España: 20
Etapas Vuelta a España: 1 (CRE)
Mejor resultado Tour de Francia: 1º (2014)
Mejor resultado Giro de Italia: 1º (2013)