Nicolás Van Looy / Ciclo21 – Enviado especial Llucena del Cid
Que el modelo de etapas por lo que se reconoce desde hace ya tiempo a la Vuelta a España no es del agrado de una enorme parte de la afición es algo público y notorio y basta con echar un vistazo a las redes sociales, ese nuevo gurú del pulso social, para comprobarlo. Que tampoco están muy convencidos de ello los propios corredores cuesta un poco más arrancárselo, pero ya llevamos días escuchándoles decir que parte de la falta de espectáculo que estamos padeciendo está causado por “el tremendo cansancio acumulado”, algo a lo que suelen unir la coletilla de “y lo que queda por delante”. Eso, claro, cuando hay un micro delante. Cuando no lo hay, el verbo se torna más directo y comprensible.
Eusebio Unzue, el comedido mánager general de Movistar, fue el último que habló abiertamente del tema en la rueda de prensa de ayer cuando aseguró que circunstancias como las vividas en la etapa de Urdax o el día de Formigal, cuando 93 corredores entraron fuera de control “suceden precisamente por esto. Entiendo que como organizador yo probablemente haría lo mismo: buscar la espectacularidad. Pero es que tenemos diez u once llegadas en alto y ¿qué ocurre? La carrera va loca salvo el día que se meten los mejores porque todo el mundo la interpreta como una oportunidad para poder ganar. Eso hace que haya una pelea enorme en los primeros kilómetros, que a veces es de hora y pico, hasta que se consolida la fuga. Y luego tienes que llegar. Y luego siempre se mete alguien en la fuga y, si os fijáis, veréis en casi todas las etapas han ido a un ritmo enorme porque siempre hay alguien atrás que no está de acuerdo y quiere cazar”.
Tras su exposición de hechos, Uzue analizó que “al no haber etapas llanas donde los equipos de los sprinters bloqueen o, como ocurre muchas veces en el Tour, donde hay escapadas de 4 ó 5 corredores… yo sé que son aburridas, pero esas etapas sirven para recuperar el físico de los corredores. Lo que no se puede pretender es que todos los días todo el mundo vaya a 40 por hora y con esta orografía y este calor. Creo que la propia organización tendrá que mirarlo un poco…”.
El máximo responsable del equipo Movistar insistió en que “nosotros somos los primeros interesados y estamos encantados cundo las crónicas hablan de etapas espectaculares. ¡Es de carne de gallina! Pero eso no se puede garantizar todos los días. Y, al final, los corredores son de carne y hueso. Y no olvidemos que la Vuelta a España está en el octavo y noveno mes de la temporada y eso significa que todo el mundo está ya con sus 60 a 80 días de competición”.
También Alberto Contador (Tinkoff), gran animador del día de hoy, aseguraba nada más terminar la etapa que jornadas como la de Mas de la Costa “están bien alguna vez porque gustan a la gente y crean afición, pero no son para todos los días”.
Pero, sin duda, el que más claro ha hablado al respecto –de forma pública– ha sido el corredor del equipo Sky David López que nada más cruzar la meta de Mas de la Costa explotó en los micrófonos de la Cadena COPE. “Esto no es ni un puerto. Es una pista asfaltada. Es una pena que la Vuelta a España, con todos los puertos que tenemos en España, tenga que recurrir a estas llegadas”.
Pero el dardo más importante llegó cuando el vasco decía que “es una pena porque la Vuelta a España hace años era una carrera a la que todo el mundo quería venir porque era bonita, era contenida, tenía una belleza siempre disputada y después de este año la gente está deseando que acabe y no volver nunca más”.
Pese a que su jefe de filas, el británico Chris Froome aseguró que mantendría su calendario para doblar Tour y Vuelta, López afirma que “lo que se habla en el pelotón es que la gente la primera carrera que se quiere quitar del calendario el año que viene es la Vuelta. Es una pena que a estas alturas la gente hable así de la carrera”.
El cabreo de López y, según su versión, de gran parte del pelotón viene porque “la gente está harta de subir estos puertos y tener todos los días 3.000 metros de desnivel”, algo a lo que se unen “los traslados que estamos teniendo, las etapas que acaban tarde porque empezamos todos los días a las 13:00, por la mañana no tenemos nada que hacer y por la tarde no te da tiempo a darte masaje… son muchas cosas y la gente está muy quemada con todo”.
Sin embargo, López acabó con un mensaje pacificador al asegurar que “a mí me está gustando la carrera, yo sólo te digo lo que dice la gente”.
Totalmente de acuerdo con lo publicado por Nicolas Van Looy. Eso mismo vengo comentandolo desde el inicio de la vuelta. Para ver buen ciclismo no hace falta someter a los ciclistas a estos porcentajes. Estuve en Mas de la Costa y era penoso ver subir a la mayoria de ciclistas. Muchos cogidos de los coches y a empujones del publico. Es eso buen ciclismo ? ……… lo peor de todo es que quien hace los recorridos son ex-ciclistas. Incomprensible !!!!