El 103º Giro de Italia ha terminado. O no. Eso depende de a quién se le pregunte. Para la inmensa mayoría de sus protagonistas, y también para los aficionados, la CRI de Milán supuso el final de una larga y dura edición de la Corsa Rosa que, de alguna manera, tuvo casi tantos frentes extradeportivos como batalla en la carretera.
Sin embargo, para el máximo responsable de la carrera, Mauro Vegni, este Giro no se ha terminado ni mucho menos. El director de la prueba se muestra todavía muy dolido por el plante de los corredores en la antepenúltima etapa, pero no ha olvidado tampoco el abandono en bloque de Jumbo-Visma y la afrenta que supuso la carta enviada por el equipo EF en la que se pedía el final anticipado de la carrera.
En una entrevista concedida a La Gazzetta dello Sport, Vegni asegura estar muy molesto con el tratamiento que, incluso antes de comenzar, sufrió el Giro. “Se llegó a decir que este Giro iba a ser una carrera de serie B, hablar así no es correcto y me parece una falta de respeto hacia nosotros y hacia los corredores”.
Pero lo que más molestó al directivo italiano fue el, a su juicio, infundado temor mostrado por dos equipos al contagio de sus corredores a lo largo de la carrera. Por un lado, no olvida Vegni el abandono de Jumbo-Visma que, al contrario que Mitchelton-Scott, no fue comunicado ni negociado previamente con la organización, ni la carta enviada por EF pidiendo la paralización de la prueba.
“Por supuesto que habrá una segunda parte de este Giro de Italia. Siempre lo dije: hablaré de ello en los foros donde debo hacerlo”, se mantiene Vegni. “Espero que haya sanciones para Jumbo-Visma y EF y para ello espero contar con el apoyo de la UCI”.
En ese sentido, el máximo responsable de la Corsa Rosa deja entrever que esta situación podría llevarle a saltarse las normas de invitación que marca el World Tour. “Si un equipo decide saltarse las normas del World Tour, yo no me tengo que sentir obligado a contar con él en la próxima edición. Desde mi punto de vista, este asunto es competencia clara de la Comisión de Licencias”.
Otro momento muy polémico y que sigue teniendo clavado Vegni es el plante de todo el pelotón en la antepenútima etapa. En ese sentido, apunta hacia los equipos: “yo soy el responsable de una organización y si mis empleados no hacen lo que se les pide, me enfado”, pero también hacia la CPA: “no lo entiendo. Los corredores necesitan un sindicato para ayudarles, no para pelear hasta el final en plena calle. Ellos se negaron a correr, pero antes de eso nunca se habló del tema”.
Además, de forma velada, acusó de cobardía a los corredores. “No me parece una casualidad que el portavoz elegido fuera Adam Hansen, que es un corredor que estaba antes su última carrera como profesional. No parece una casualidad, ¿verdad? El portador de la maglia rosa, Wilco Kelderman, salió en televisión apoyando el plante, pero un día más tarde vino a disculparse”.
Respecto a la edición de 2021, Vegni adelantó que “el 104º Giro de Italia será presentado en el mes de enero. Su recorrido ya está completamente diseñado, pero ahora mismo resulta muy complicado hacer muchos planes. Hay que entender la situación de cierre que estamos atravesando. En cualquier caso, tenemos distintas opciones sobre la mesa. La Grande Partenza podría estar fuera de Italia, pero en la situación actual eso es algo muy complicado”.