No ha podido llegar. La misión era complicada, pero Mikel Landa ha tratado de recuperarse de las lesiones sufridas en el Tour de Francia y, sobre todo, en la Clásica de San Sebastián para poder tomar la salida, junto a Valverde y Quintana, en la Vuelta a España, pero finalmente el corredor y los responsables de Movistar han acordado posponer el regreso competitivo del corredor alavés–
Según un comunicado hecho público esta misma mañana por el conjunto telefónico, Landa sufre todavía dolores tras las fracturas producidas por una caída en la Clásica de San Sebastián, sumadas a las molestias ocasionadas por el golpe anterior sufrido en la novena etapa del Tour de Francia, lo que ha aconsejado su ausencia en el ocho de Movistar para la ronda española, cuya composición final se conocerá este mismo lunes.
“Hemos luchado por todos los medios, durante estos 15 días, para que Mikel pudiese alcanzar a tiempo un alto grado de recuperación, pero no ha sido posible“, aseguraba Eusebio Unzue, manager general del conjunto azul, que añadía que el alavés «hHa pasado por días mejores y peores, pero a fin de cuentas y en este momento decisivo, no se encuentra con suficientes garantías como para poder tomar la salida”.
A Innsbruck, vía Gran Bretaña
“El dolor en la zona lumbar por su fractura y la doble rotura que sufría en las costillas se han combinado y han hecho que nos falte el tiempo suficiente para llegar a Málaga en unas condiciones mínimas. Ahora lo primero es centrarnos en conseguir su recuperación total, y con posterioridad a ello evaluaremos si puede llegar en buenas condiciones a la Vuelta a Gran Bretaña. Son ocho días de competición, muy intensos, que creemos podrían darle el estado de forma suficiente para que el seleccionador español pueda contar con él en el Mundial de Innsbruck“.