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Programa día 3 Mundial pista 2015
Teruel, a la izquierda © UCI
Segunda medalla para España en los Mundiales de pista y como la de ayer de Torres, de plata, a cargo de Eloy Teruel en la puntuación. El murciano no lo tuvo nada claro ya que su condición de hombre más fuerte se tradujo en un marcaje férreo y despiadado que acabó con todas sus intentonas a lo largo de las primeras 140 vueltas de carrera.
Pero en la parte final, sí logró esa ansiada vuelta que persiguió durante toda la prueba y que le permitió sumar 20 puntos –que junto a los 10 que llevaba en sprints intermedios- le colocaba segundo, a un solo punto del ruso Artur Ershov (31 a 30). El final se presumía agónico ya que a un punto del español estaban el alemán Maximilian Beyer y el neozelandés Regan Gough (29) y a tres el hong-konés King Lok Cheung (27). Cualquiera podía ganar, pero esa última puntuación no cambio el desenlace ya que los corredores que iban destacados, como el norteamericano Nicholas Rodgers, no llegaron a coger vuelta.
Ershov, Gough y Cheung pusieron la prueba a su favor cuando ganaron vuelta en el primer tercio de prueba. Teruel lanzaba numerosas andanadas a las que siempre respondían sus rivales. Incluso una bastante seria poco antes de mitrad de carrera que le valió cinco puntos, pero no ganar vuelta.
Durante algún tiempo desapareció de cabeza sabiendo que la dureza de la prueba jugaba a su favor. Pero el tiempo pasaba y la situación no cambio hasta esas vueltas finales en las que se jugó el todo por el todo. El alemán Beyer se aprovechó de ese esfuerzo para sumar el bonus de 20 puntos de vuelta ganada, pero al final también el español que lo lograba, después de haber sido segundo y tercero en los dos sprints anteriores, a falta de apenas cinco colocándose segundo… a falta de ese sprint final que, para bien o para mal, no cambió nada.
De esta forma, el español logra su tercer metal en la puntuación –plata en 2013 y 2015 y bronce en 2014-, un resultado que le dejaba bastante satisfecho. “A falta de cuarenta vueltas estaba a punto de arrojar la toalla y casi pierdo los papeles. No me he podido mover en ningún momento. El italiano, sobre todo, el australiano y el colombiano no me han dejado ni a sol ni a sombra. Entiendo que ellos hagan su carrera, que me vigilen. Pero una vez que estamos todos en el mismo intento, que colaboren, que me den un relevo. Imposible. Por eso lo veía muy mal y estaba bastante quemado. Afortunadamente me he podido rehacer y al final he conseguido ganar vuelta”.
Un final que, en palabras del propio corredor, no sabía muy bien como estaba. “Me decían que me faltaba un punto, pero creía que era para entrar al podio, no para ganar. Pero no he tenido ninguna opción en el sprint final. Quizá en las vueltas anteriores, si el americano no se hubiera puesto nervioso y se hubiera ido por delante, podía haberle ganado esos sprints y haber sido oro y él haber estado en el podio. Pero no hay que darle más vueltas, sobre todo después del sufrimiento que he tenido en carrera”.
Teruel señala también que “las sensaciones no han sido las mejores, porque he estado más centrado en preparar la persecución por equipos, que es lo que nos da de comer en España, por el tema de las becas. Por ello no he entrenado tanto la puntuación como me hubiera gustado. Es una pena que la puntuación haya dejado de ser olímpica”. Y finaliza diciendo que “una medalla es siempre un gran resultado, pero espero que algún día llegue por fin el oro”.
El resto de la jornada
La tercera jornada se iniciaba a las dos de la tarde con la clasificatoria de la velocidad femenina, con 30 participantes en liza de las que pasaban 24 a la primera ronda. Ni Tania Calvo (13ª, 11.004), ni Helena Casas (22ª, 11.249) tenían problemas para superar el corte, aunque en el caso de la catalana su puesto significaba medirse en dieciseisavos contra una rival muy cualificada como la australiana Stephanie Morton, que la superaba como era de prever.
Por su parte, Calvo daba cuenta de una rival complicada como Virginia Cueff, aunque la francesa plantó cara hasta el final. En octavos, en cambio la rival era mucho más peligrosa, la china Tianshi Zhong que había marcado el mejor tiempo en los 200 y no hubo margen de sorpresa.
A la alavesa le quedaba la opción de la repesca, para seguir en cuartos, aunque con dos rivales que tampoco resultaban fáciles, caso de la lituana Simona Krupeckaite y la australiana Anna Meares. “Y aunque luchó bien, le faltó un poco para poder pasar. Hay que tener en cuenta que era una serie muy complicada”. Ello le suponía la undécima plaza final, “aunque lo más importante son los puntos de cara a Río, tanto los logrados por Tania como por Helena”.
Tras los cuartos de final vespertinos, mañana se verán las caras en semifinales Zhong frente a Kristina Vogel y Morton ante Elis Ligtlee.
Pasando a la persecución femenina, Gloria Rodríguez terminaba en el puesto 18 (3:45.409), un resultado ligeramente por debajo de lo deseado por el seleccionador. “Como decía esperaba que estuviera en su marca, en un 3:43, independientemente del puesto. Pero no ha podido ser, quizás se le haya hecho largo”.
El oro sería para la australiana Rebecca Wiasak –que curiosamente no formaba parte de la cuarteta que ganó el oro y batió el record del mundo, que derrotaba fácilmente a la norteamericana Jennifer Valente, mientras que la también australiana Amy Cure dejaba a la gran favorita, la británica Joanna Rowsell, sin podio.
Finalmente, reseñar la ausencia de Pepe Moreno en el kilómetro, en el que estaba inscrito, ya que una inoportuna gripe originó que se tomara la decisión de que descansara de cara a estar recuperado para mañana en la velocidad, prueba de referencia por su carácter olímpico.
A François Pervis esta condición de prueba no olímpica no le importó para volver a dar el máximo y sumar su segundo oro, lo que le pone en camino de igualar su gesta de Cali. El galo marcó los mejores tiempos en todos los parciales, pero fue a menos y al final solo aventajó al alemán Joachim Eilers en 9 centésimas (1:01.207 a 1:01.294) con el neozelandés Matthew Archibald como bronce, como informa la RFEC.
Desgraciadamente, no va a ser el omnium deseado para Unai Elorriaga el del Mundial de Saint-Quentin-en-Yvelines ya que después de la primera jornada ocupa la decimonovena plaza, sin opciones de acabar ya entre los mejores.
El corredor vasco no comenzaba demasiado bien su concurso, al terminar en el puesto 17 el scratch en el que se imponía el italiano Elia Viviani, por delante del británico Jonathan Dibben. Pero en la persecución tampoco le iba demasiado bien, al ser decimosexto (4:32.9131), lo que le suponía descender a una oscura decimonovena plaza en una general que en ese momento encabezaba el colombiano Fernando Gaviria.
Y en la eliminación se confirmaba el mal estado del vasco, ya que quedaba pronto fuera de carrera, decimoctavo, en una prueba que tuvo un vibrante final con Viviani por delante del francés Thomas Boudat y Gaviria.
Precisamente son estos tres ciclistas quienes lideran la general: el colombiano con 110 puntos, por 102 del italiano y 94 del francés, empatado con el belga Jasper De Buyst. Elorriaga suma 24 en esa 19ª posición, aunque a un solo punto del 17.
“La verdad es que me ha sorprendido. En el scratch he visto que no andaba bien y en la persecución debería haber estado un poco mejor. Es una pena, pero no quiero sacar conclusiones hasta que no termine”, comentaba el seleccionador, Salvador Meliá.
Mañana Elorriaga afrontará las tres pruebas restantes del omnium: en la primera sesión (de 13,00 a 18,35), el kilómetro y la vuelta lanzada; en la segunda (19,00 a 22,10), la puntuación.
Olaberria, nuevamente en acción
Junto al vasco habrá otros cinco españoles en liza, destacando la presencia de Leire Olaberria en el omnium femenino, en el que la norteamericana Sarah Hammer, la británica Laura Trott, la australiana Sarah Hammer, la belga Folien D’Hoore o la neerlandesa Kirsten Wild son las principales favoritas. Pese a las malas sensaciones del miércoles en la puntuación la vasca es una de las grandes bazas españolas en este Mundial, aunque el podio es complicado. Esto es lo que nos contaba antes de salir hacia París.
En su caso competirá en la primera sesión en el scratch y en la persecución, y ya por la tarde-noche, en la eliminación, quedando las tres restantes pruebas para el domingo.
José Moreno y Juan Peralta inician igualmente la velocidad con diferentes objetivos: para el castellano-manchego, que esperemos esté plenamente recuperado de la gripe que le ha impedido competir hoy, pasar el corte, algo que no lograrán 11 de los 35 participantes; para el navarro, llegar por lo menos al top 12. Muchos favoritos, comenzando por el francés François Pervis, el neerlandés Jeffrey Hoogland, el alemán Stefan Botticher, el ruso Dennis Dmitriev, el colombiano Fabian Puerta, el británico Jason Kenny o el australiano Matthew Glaetzer.
En persecución individual, el representante español será Sebastián Mora, en una prueba desgraciadamente devaluada, con los australianos Jack Bobridge y Alexander Edmondson, el suizo b o el británico Andrew Tennant como principales referencias, mientras que la participación española se completa –en la sesión vespertina- con Sheyla Gutiérrez en un scratch en el que compite sin presión, con el objetivo de ir cogiendo experiencia internacional. Las tres mejores de 2014, Kelly Druyts (Bélgica), Katarzyna Pawlowska (Polonia) y Evgenuya Romanyuta (Rusia), estarán en la salida.
