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La esperada tercera medalla española en los Mundiales de pista, que hoy han terminado en Saint-Quentin-en-Yvelines, no ha podido llegar en la madison, en la que la dupla española terminaba cuarta, empatada a 15 puntos con Bélgica (Jasper De Buyst y Otto Vergaerde), bronce, y por detrás de Francia (Bryan Coquard y Morgan Kneisky) e Italia (Liam Bretazo y Elia Viviani), con 21 y 20 puntos respectivamente. Ello no empaña la magnífica actuación de David Muntaner y Albert Torres.
Aunque Gran Bretaña se puso en cabeza en los primeros compases de la prueba, al ganar vuelta, pronto se vio que iba a ser una carrera muy igualada, posiblemente una de las más disputadas de los últimos tiempos, con bastantes selecciones al mismo nivel pero con Francia e Italia –y en menor medida Bélgica– destacándose en los sprints intermedios.
España quiso ser protagonista, pero no pudo coger esa ansiada vuelta en las dos veces que más claramente lo intentó, a mitad de carrera y en el cuarto final, ya que todos los equipos tenían muy claro el movimiento de nuestros corredores. En todo caso, los dos españoles se mantenían con opciones hasta el final, cuando se fueron con Italia. Al final se unieron otras selecciones como Francia, Bélgica o Alemania y los jueces no dieron vuelta ganada, sino perdida al resto, entre ellas Gran Bretaña que cedía su liderato. La igualdad volvía a ser manifiesta en el marcador, con seis selecciones en la misma vuelta.
Un segundo lugar logrado en el penúltimo sprint colocaba a España segunda, a sólo tres puntos de Francia, pero empatada con Italia y amenazada por Bélgica. No había tiempo material ya para intentar ganar esa vuelta por lo que el sprint final sería fundamental. Y en él, los rapidísimos Viviani y Coquard a muerte se jugaban el oro y la plata, con triunfo insuficiente para el transalpino, mientras que Bélgica lograba el punto de la cuarta posición con lo que empataba a 15 con España y la dejaba fuera del podio por el valor como desempate de esa última clasificación.
Leire, séptima
Por su parte, Leire Olaberria terminaba en séptima posición, con 129 puntos, en una prueba que se llevaba merecidamente la australiana Annette Edmondson, con 192, por delante de la británica Laura Trott, con 176, y la neerlandesa Kristen Wild, con 175.
La cuarta prueba, los 500 metros, era un lastre para la hasta ese momento líder, Wild, y un espaldarazo para Edmondson, que ganaba con 35.064 y pasaba a liderar la prueba, mientras que Leire era octava (36.101), manteniendo la misma plaza con la que había comenzado la jornada, pero con mejores perspectivas: entre la quinta y ella, apenas dos puntos de separación.
La australiana volvía a imponerse en la vuelta lanzada (14.024), con lo que ratificaba su liderato, con la española nuevamente octava (14.310), aunque en esta ocasión ello le permitía ascender hasta la sexta plaza.
Quedaba la puntuación, en la que la española podía aspirar a mejorar una plaza, ya que Mariles Mejías se encontraba a cuatro puntos. Pero la cubana mantuvo bien su renta gracias a los sprints intermedios. Por el contrario, la española se vería rebasada por la bielorrusa Tatsiana Sharakova, también gracias a los pasos puntuables, e incluso por la norteamericana Sarah Hammer, por vuelta ganada, aunque la vasca pudo sumar cinco puntos en el penúltimo paso y recuperar esa séptima plaza final.
“Ha sido el omnium más duro que he corrido nunca –decía la guipuzcoana-, en el que he sufrido muchísimo. Pero he terminado contenta, aunque quizá podría haber estado algún puesto por encima. La jornada de hoy ha sido muy difícil porque la sesión de la mañana se ha retrasado y apenas ha quedado tiempo entre la vuelta lanzada y la puntuación, y todas llegábamos bastante cansadas. Se me ha complicado un poco, pero he podido reaccionar y demostrar que puedo estar ahí. Con el nuevo formato, el omnium es más duro pero a la vez más abierto. Pienso que lo mejor es que me he visto tácticamente bastante bien, que he tenido recursos para responder cuando las cosas se complicaban. Por otro lado, los tiempos en las cronometradas han sido algo peor de lo que esperaba. Por todo ello, puedo sacar conclusiones positivas, porque hay detalles mejorables. Y sobre todo, porque la clasificación para los Juegos se ha enderezado tras un comienzo de año bastante negativo”.
Pasando al keirin, Tania Calvo no pudo superar su serie –en la que fue quinta- y se vio abocada a una repesca de solo tres corredoras bastante asequible, aunque tampoco lograba así el pase a semifinales. La australiana Anna Meares volvía por sus fueros y se llevaba el oro por delante de la neerlandesa Shanne Braspennincx y la cubana Lisandra Guerra.
Finalmente indicar que en la velocidad masculina, François Pervis veía terminar su sueño del doble triplete en cuartos, al caer contra su compatriota Gregory Baugé en el desempate, aunque podrá decir que caía ante el hombre que al final lograba el oro –el cuarto válido de su carrera en esta disciplina- al vencer en la final al ruso Denis Dmitriev. Quentin Lafargue completaba el colorido francés en el podio.
Fuente: RFEC
