Mundial pista: Mora y Torres, quintos en madison

3 marzo. 5ª jornada

Mora y Torres en un relevo © UCI

TrackPiste / Ciclo21

A pesar de haber llegado con apenas unas horas de los Emiratos Árabes al velódromo de Pruszkow, con el riesgo y el cansancio que ello supone, Roger Kluge hizo valer su momento de forma y lo que supone correr habitualmente en el ProTour para revalidar junto a Theo Reinhardt su título de campeones del mundo de madison, en una prueba en la que teníamos muchas esperanzas con Albert Torres y Sebastián Mora, que terminaban finalmente quintos, un gran resultado a tenor de cómo se vivió la madison más vibrante y competida de los últimos tiempos.

Los germanos finalizaban con 105 puntos -con tres vueltas ganadas- por 84 de los daneses Lasse Norman Hansen y Casper Von Folsach y 82 de los belgas Kenny De Ketele y Robbe Ghys -todos ellos con ese triple ‘bonus-, con los españoles con 40 puntos, gracias a ganar el último sprint en el que subieron dos posiciones, desplazando a Francia y Polonia.

Australia y Alemania fueron las naciones que inicialmente más se prodigaron, hasta que los polacos se movieron cuando apenas se llevaban 50 vueltas, y los alemanes entendieron que era su momento, ganando vuelta, aunque posteriormente lo harían otras naciones como Dinamarca, Bélgica, Australia o Gran Bretaña, en una carrera que estaba resultando trepidante. España no se había metido en esos movimientos, pero aprovechó muy bien el parón para arrancar y meterse en una batalla que ya había separado el grano de la paja, aunque la potente dupla francesa se había quedado inicialmente fuera.

Alemania fue poco a poco abriendo hueco en el marcador gracias a su presencia en los sprints, pero la clave estuvo en una segunda vuelta que ganarían junto a australianos, belgas o franceses y posteriormente los daneses. España se quedaba en un segundo pelotón y según iba avanzando la carrera se veía que las opciones de podio para Torres y Mora comenzaban a esfumarse.

Con dos vueltas ganadas, Kluge y Reinhard tenían ya una cómoda diferencia, por lo Dinamarca entendió que las opciones para ganar -el simple podio no les valía- pasaban por ganar vuelta y a ello se pusieron, lográndolo cuando quedaban menos vueltas con lo que alcanzaban el liderato provisional, aunque Alemania y Bélgica reaccionaban y también lo hacían en la parte final. Para los germanos significaba el tercer ‘bonus’ y ratificar su victoria; para los belgas, regresar al podio pero sin poder superar a los nórdicos.

Tan sólo quedaba ese último sprint en el que el protagonismo de los españoles les suponía diez puntos muy bien aprovechados para terminar en una quinta plaza que, insistimos, es un excelente resultado.

El resto de la última jornada

Manly celebra su oro © UCI

Siguiendo con el fondo, pero en femeninas, la puntuación supuso un nuevo éxito de Australia, con Alexandra Manly, y un nuevo metal de Kirsten Wild, el bronce, tras los dos oros -omnium y madison- y la plata de la puntuación, con lo que la neerlandesa vuelve a irse de un Mundial habiendo ‘mojado’ en todas las disciplinas en que ha tomado parte. Entre ellas, con la plata, la irlandesa Lydia Boylan. Irene Usabiaga tenía un papel secundario para terminar decimoctava.

Wild controló muy bien la carrera en los sprints, pero no pudo evitar que Manly y la hongkonesa Qianyu Yang ganasen vuelta y le privasen del liderato, aunque más definitivo pudo ser un ataque de la irlandesa -que se situaba primera provisional. y de la rusa Guinaz Badykova, que también se saldaba con el ‘bonus’ dejando todo muy abierto para el último sprint, en el que se imponía Wild para entrar en el podio, con Manly tercera, para recuperar el liderato.

Hoogland, el más veloz del mundo © UCI

La velocidad masculina significaba ese tan deseado momento de los Paises Bajos de ratificar en la individual el dominio de los últimos años por equipos, y Harrie Lavreysen y Jeffrey Hoogland se plantaban en la final en la que se imponía con autoridad el primero de ellos, de apenas 21 años. El podio lo completaba, ante el delirio de sus compatriotas, el polaco Mateusz Rudyk, que daba cuenta en la final del ya ex campeón Mathew Glaetzer. El australiano había ganado el primer enfrentamiento de la final B, pero fue descalificado, y el polaco no le dio opción de formar el desempate.

Los Mundiales terminaron con el keirin femenino donde Sarah Lee Wai Sze se confirmaba como la reina de las esprinters, al hacer doblete en las dos pruebas cortas, tras su triunfo el viernes en la velocidad. En esta ocasión su rival no fue Stephanie Morton sino la también australiana Karlee McCulloch, en una final en la que las oceánicas no supieron hacer valer su doble presencia. Daria Shmeleva completaba el podio, con lo que se anotaba su tercer metal en estos Mundiales -oro en 500 y plata en la velocidad por equipos-, con la duda de saber qué hubiera pasado si no hubiese sido justamente eliminada en la velocidad.

Helena Casas fue la representante española, clasificada finalmente en el puesto decimonoveno, tras ser quinta en su serie y tercera en la repesca, con el nuevo sistema que introduce un enfrentamiento más y que no aporta nada salvo cansancio.

CLASIFICACIONES COMPLETAS

2 marzo. 4ª jornada

A pesar del excelente comienzo de la competición para Albert Torres, el ómnium terminó sin medallas para el español, sexto clasificado en una prueba que cambió totalmente en la puntuación, que deparó el triunfo del neozelandés Campbell Stewart, con 137, por 119 del francés Benjamin Thomas que arrebataba la plata al británico Ethan Hayter, en el último sprint, con 118, mientras que el español se quedaba en 101.

El ómnium comenzaba con un scratch que no resultó muy duro, y que tuvo muchos movimientos en cabeza sin que ninguno fuera realmente de entidad y sin que Torres estuviera presente… hasta que el español aprovechó un parón para contraatacar en el momento justo, lanzar un fortísimo ataque que nadie secundó… y que incomprensiblemente ni siquiera provocó una reacción de caza en el grupo, ya que nadie quiso asumir la responsabilidad. Por ello, el balear ganó rápida y cómodamente una vuelta que le daría el triunfo, por delante de Sam Welsford, Stewart y Hayter. Una demostración más efectiva que práctica ya que solo se traducía en dos puntos de ventaja sobre el siguiente.

La ‘japonesa’ comenzó con una escapada del francés Thomas, que estuvo en cabeza en solitario de la segunda a la decimotercera vuelta, con lo que la carrera se mantuvo muy bloqueada, hasta que reaccionaron Hayter y el japonés Eiya Hashimoto, sin que pudiera alcanzarlos Torres, que llegaron a ganar vuelta con lo que terminaban siendo primero y segundo. El español sumaba un punto en las últimas vueltas, lo que le servía para terminar octavo, cediendo el liderato ante el británico, aunque manteniendo una interesante tercera plaza, a sólo ocho puntos.

En una eliminación en la que cayeron muy pronto algunos de los favoritos como Welsford o Hashimoto, el español tuvo una de sus mejores actuaciones, aguantando bien, aunque coqueteó con la eliminación temprana en un par de ocasiones, para ceder cuando solo quedaban cuatro ciclistas. El triunfo, para Thomas, por delante de Jan Willem Van Schip y de Claudio Imhof, aunque la general quedaba muy apretada, con Hayter, Campbell y Torres en dos puntos, y Van Schipp por detrás.

Teniendo en cuenta que la puntuación es la prueba favorita de Torres, podíamos esperar todo, pero… el español no apareció y solo sumaría un punto, cediendo posiciones según transcurrían las vueltas. Poco a poco Stewart y Hayter fueron abriendo hueco en los sprints, hasta que el ‘kiwi’ sorprendía a su rival, ganando vuelta y sentenciando el ómnium. El italiano Simone Consoni también se metía en la pelea, con opciones incluso de podio, aunque el más peligroso sería Thomas. Todo quedaba para el último sprint, con estos dos candidatos y Hayter, en el que el triunfo del galo le llevaría al podio.

Podio del omnium © UCI

Se estrena Shmeleva

La final de los 500 metros supuso el primer oro de Daria Shmeleva, campeona continental, tras la plata por equipos y la descalificación de ayer. La rusa marcaba el mejor tiempo en la clasificatoria matinal (33.544) y lo mejoraba sensiblemente por la tarde (33.307), aunque la mejora más provechosa fue la de la ucraniana Olena Starikova (de 33.674 a 33.307) que le daba la plata, desplazado a la australiana Kaarle McCulloch (33.419) y a Mirian Welte (33.431), que se quedaba sin podio tras haber sido oro en 2014 y 2018, y otras cinco veces medallista.

Por el contrario, Tania Calvo no pudo meterse en el corte de las ocho mejores en los 500, donde se quedó fuera del top ten por primera vez desde 2012. Sus 34.333 quedaban lejos de los 33.9, por ejemplo, que el año pasado le supondrían la sexta plaza. Tampoco tuvo opción Helena Casas, decimosexta con 34.415.

Por su parte, la australiana Ashlee Ankudinoff se hacía con el triunfo en la persecución, superando claramente a la germana Lisa Brennauer (3:25.971 a 3:29.243), quien no estuvo al mismo nivel de la clasificatoria matinal, en la que marcaba el mejor tiempo, aunque con un estrecho margen sobre la australiana (3:25.697 a 3:25.921) lo que anticipaba una final vespertina muy abierta, qiue no lo fue tanto. Eso sí, Alemania compensó la derrota, con otra plaza en el podio, la de Lisa Klein, ganadora en la consolación de Kristie James.

El título que le faltaba a Wild

La pareja holandesa © UCI

Siguiendo con el fondo femenino, Kirsten Wild lograba el único título que se le escapó el año pasado en Apeldoorn -donde fue plata-, la madison, formando pareja con su inseparable Amy Pieters. La supercampeona neerlandesa está demostrando que va a más en este Campeonato y en la madison comenzó muy fuerte, abriendo hueco en la clasificación respecto a todas las rivales, siendo primeras o segundas en los seis primeros sprints.

Por detrás, había bastante igualdad entre los equipos de Australia, Gran Bretaña -con Elinor Barker junto a Neah Evans, tras la caída de ayer de Katie Archibald-, Italia o Dinamarca, aunque esta lucha sirvió para que las ‘aussie’ se colocasen a solo cinco puntos de las líderes. Pero el momento más peligroso fue cuando las nórdicas se lanzaron a ganar vuelta a falta de 16 giros y, aunque no lo lograron, con los 15 puntos ganados Amalie Dideriksen y Julie Leth llegaban al tercer cajón del podio, con 24, por detrás de unas Amy Cure y Georgia Barker que tuvieron que emplearse a fondo en la última puntuación para mantener la plata, con 31 puntos, frente a los 33 de las ganadoras.

Finalmente, la velocidad comenzó hoy con las impresionantes marcas de los neerlandeses Jeffrey Hoogland y Harrie Lavreysen y del polaco Mateusz Rudyk, todos ellos por debajo de 9.6 (9.572 el primero y 9.584 los otros dos), con Juan Peralta marcando 9.970 y quedando en vigésimo sexto lugar. Por cierto, el corte estuvo en 9.990. Ello le suponía al español un enfrentamiento complicado contra el australiano Nathan Hart que le dejaba fuera de carrera.

La única sorpresa antes de los cuartos era la eliminación del francés Sebastian Vigier, cuarto tiempo de los 200, en octavos ante el neozelandés Ethan Mitchell, mientras que el otro ‘kiwi’, Sam Webster había dado cuenta del tercer neerlandés, Mathijs Buchli, en la primera ronda.

Y como era de esperar, se cumplieron los pronósticos con unos interesantísimos cruces Hoogland-Mathew Glaetzer y Lavreysen-Rudyk.

Madison, ¿guinda del pastel español?

El desenlace de la velocidad se vivirá mañana, en la quinta y última jornada de estos Mundiales, de 12:00 a 13:11 y de 14:00 a 17:02 –sesión que contará con la presencia de las cámaras de Eurosport- y que también dirimirá otros tres títulos más.

Sin duda, es la madison donde estarán depositados los ojos de los aficionados españoles, con Albert Torres y Sebastián Mora, tras la decepción del menorquín, aunque desde su entorno nos tranquilizan, y las buenas maneras del castellonense ayer viernes.

El nivel de la prueba es altísimo, destacando la presencia de los actuales campeones, los germanos Roger Kluge –recién y peligrosamente llegado del Emirates Tour- y Theo Reinhardt, de los daneses Lasse Norman Hansen y Casper Von Folsach –recordemos que los nórdicos ganaron las cuatro mangas de la Copa del Mundo que disputaron y con tres parejas distintas-, de los británicos Ethan Hayter y Oliver Wood, de los italianos Simone Consonni y Michele Scartezzini, de los belgas Kenny De Ketele y Robbe Ghys –aunque el primero no parece estar al cien por cien tras su lesión de hombro-, de los franceses Benjamin Thomas y Bryan Coquard, y ojo a la apuesta australiana con Leigh Howard y Cameron Meyer, que renunciaba a ‘su’ puntuación para centrarse en esta prueba, en lugar del prometedor Kellend O’Brien.

Por su parte, las féminas competirán en keirin y en puntuación. Helena Casas será la representante española en la prueba de las velocistas, donde no estará finalmente la flamante campeona de velocidad Sarah Lee Wai Sze, pese a sus notables actuaciones en esta disciplina en Copa del Mundo, donde se llevaba dos victorias y el triunfo en la general. La nómina de candidatas es muy amplia: la australiana Stephanie Morton, la vigente campeona, la belga Nicky Degrendele, la neerlandesa Laurine Van Riessen, la rusa Daria Shmeleva o la china Yufang Guo, con ese nuevo e incomprensiblemente ampliado sistema en cinco rondas: clasificatorias y repescas por la mañana y cuartos, semifinales y finales, por la tarde.

Por su parte, la puntuación será la segunda actuación de Irene Usabiaga en este Mundial, en una carrera que contará con la actual campeona Kirsten Wild como gran referente, y donde se mezclan corredoras que ya estuvieron en el ómnium, caso de Lotte Kopecky, Jennifer Valente, Ina Saveka, con otras corredoras reservadas para esta prueba –aunque algunas compitieran hoy en la madison- como son Maria Giulia Confalonieri, Neah Evans, Alexandra Manly o Trine Schmidt.

Clasificaciones

1 marzo. 3ª jornada

Podio de la prueba © RFEC

La tradición de la puntuación como una prueba ‘española’ se ha continuado esta tarde con la medalla de plata de Sebastián Mora, que ha hecho una carrera muy inteligente, aunque se encontraba con la absoluta fortaleza de un Jan Willem Van Schip que hacía valer mayor punta de velocidad en los sprints intermedios y se imponía por 104 a 76, con el irlandés Mark Downey completando el podio, con 67. 

La carrera fue muy movida desde el principio y hasta 36 vueltas se ganaron en el transcurso de la prueba. Van Schip ganaba los cuatro primeros sprints, decantando la prueba a su favor hasta que apareció un Mora que se colocaba en posiciones de podio, incluso encabezando la prueba en algunos momentos.

Poco a poco se vio que el título iba a estar entre los dos, aunque el contraataque de corredores como el australiano Kellend O’Brien, el polaco Wojchech Pszczolarski, el italiano Liam Bertazzo o el británico Mark Stewart hacían pensar que se igualaría la carrera.

Pero no. Mora ganó una nueva vuelta, pero el ‘oranje’ fue su sombra, sabiendo que era el rival más peligroso, lo que hizo que ambos sumaran hasta tres ‘bonus’ y se hiciesen con el oro y la plata. Lo mismo terminaría haciendo Downey, lo que le daría el tercer lugar del podio haciendo valer su mejor posición en el último sprint para desempatar ante el local.

Declaraciones del protagonista. «Ha sido una carrera muy rápida, he intentado plantarle cara a Van Schip pero estaba muy fuerte He tirado de sangre fría para ir a por vuelta, pero él ha sido más fuerte y hay que darle la enhorabuena. Vamos a disfrutar de esto y a ver si el domingo podemos hacer un buen papel», comentaba el corredor en la ruta de Caja Rural Seguros RGA.

En cuanto al ómnium femenino, victoria para Kirsten Wild, aunque la competición no ofreció en ningún momento una superioridad tal y como la que había mostrado hace un año en Apeldoorn. Solo en la puntuación final la neerlandesa fue abriendo hueco ante la que quedaría como única rival, la italiana Letizia Paternoster, aunque no fue hasta el último sprint, en la que no entró ninguna de las dos, cuando se decidió: 117 a 115. Fue en esa llegada en la que la norteamericana Jennifer Valente lograba un segundo puesto que le suponía el bronce, al desempatar con la japonesa Yuni Kajihara, ambas con 106.

Foto: UCI Track

El ómnium tuvo muchas alternativas, con victoria de Pasternoster en el scratch, de Kajihara en la ‘tempo’ y de Valente en la eliminación, sin que sobresaliese ninguna corredora. De hecho fue más sorprendente no ver en ningún momento el protagonismo de Katie Archibald, séptima al final, sustituta a última hora de Laura Kenny, enferma, o de Nettie Edmondson, que tras un segundo puesto en el scratch fue desapareciendo de carrera, aunque una vuelta ganada en la puntuación la llevaría a terminar quinta.

En cuanto a Ana Usabiaga, desgraciadamente no pudo tener protagonismo: vigésima en scratch y eliminación, y decimonovena en la tempo, para acabar en el puesto 21, lo que se traduce en una mala noticia de cara a las opciones de estar en Tokio 2020.

Pasando a la velocidad, el torneo se saldó sin sorpresas y sin tener que disputarse  ni un solo desempate: la coreana Sarah Lee Wai Sze superaba fácilmente a una Stephanie Morton que se vio incapaz de plantarle cara, y en la lucha por el bronce entre las dos jóvenes promesas, pesó más la madurez de Mathilde Gros que el desparpajo de Lea Sophie Friedrich.

Tercer título para Ganna

No lograron entrar en la final de persecución los que estaban llamados a ser principales protagonistas de esta competición, a tenor de lo visto en los últimos meses. El norteamericano Ashton Lambie era quinto (4:12.886) y el británico John Archibald, séptimo (4:14.730). Pero ahí emergía otro de los grandes favoritos y campeón saliente, el italiano Filipo Ganna, para marcar en la clasificatoria un tiempazo de 4:07.456, a apenas dos décimas del record del mundo de Lambie, con el germano Domenic Weinstein con otro registro sobresaliente 4:09.091, al que un error de cronometraje le daba un 4:05, un récord del mundo imposible que incluso fue anunciado por las redes sociales.

En la final el transalpino no comenzó tan rápido, pero terminaría yendo a más para marcar el segundo mejor tiempo de su carrera y el tercero de la historia (4:07.992), y su tercer arco iris (2016, 2018 y 2019) en una final en la que su rival no existió (4:12.571).

Tras el fiasco de las persecuciones por equipos, Italia se tomaba la revancha en la individual ya que metía al hasta hace poco semidesconocido Davide Plebani en la final B, en la que superaba al ruso Alexander Evtushenko (4:14.572 a 4:16.784).

del doblete italiano, pasamos al francés en el kilómetro, en una final que tuvo a los mismos protagonistas en el podio que en la clasificatoria matinal y en el mismo orden, aunque todos los participantes con peores tiempos: Quentin Lafargue (1:00.029), Theo Bos (1:00.388) y Michael D’Almeida (1:00.826).

Por la mañana Lafargue había sido el único en bajar del minuto en la clasificatoria (59.845)para determinar los ocho finalistas vespertinos, entre los que no estaba un Pepe Moreno que salía satisfecho de su actuación, mejorando su 18º puesto de Apeldoorn, aunque no su marca personal (1:02.050 frente a 1:01.957) ni la undécima posición de Londres 2016.

Clasificaciones

28 febrero

Foto: Australia Cycling

TrackPiste / Ciclo 21

Que la final de persecución masculina entre Australia y Gran Bretaña ofrecía todos los ingredientes estaba claro pero que se saldase con un record del mundo no parecía tan probable. Por las referencias pensábamos que iban a estar por debajo de 3:50 las dos selecciones y que cualquiera podía ganar. Pero que los aussies lo hiciesen con 3:48.012 batiendo el record del mundo que tenían desde el año pasado por 1,8 segundos. 

Leigh Howard, Sam Welsford, Kellend O’Brien y Alexander Porter no daban opción a Charlie Tanfield, Ed Clancy, Kian Emadi y Ethan Hayter y en todo momento llevaron la delantera para imponerse por casi tres segundos (3:50.810) y dar el primer aviso de cara a Tokio 2020, que no solo se trata de ganar a corto plazo sino de ir ‘asustando’ de cara a los Juegos Olímpicos.

La lucha por el bronce no tuvo color ya que Dinamarca superó claramente a una Canadá que ya había hecho bastante llegando a la final B. Lo importante es que los nórdicos -Julius Johanssen, Lasse Norman Hansen, Rasmus Pedersen y Casper Von Folsach- también hicieron un tiempazo, de 3:51.804.

Foto: UCI Track

Y por si fuera poco, en la versión femenina también se producía idéntico resultado, aunque de forma más ajustada ya que el equipo australiano tuvo un problema en los últimos relevos y a punto estuvo de ceder ante el británico: 4:14.333 frente a los 4:14.537. Y en el podio la cara de Ellinor Barker, Laura Kenny, Katie Archibald y Eleanor Dikinson era todo un poema comparada con las de las nuevas campeonas -que no estaban en lo más alto desde el Mundial de 2015: Amy Cure, Ashlee Ankudinoff, Georgia Baker y Nettie Edmondson, con Alexandra Manly como quinta corredora. Pero la mayor alegría correspondía a una Nueva Zelanda que con 4:16.479 se llevaba el bronce ante Canadá, enjugando el mal sabor de sus equipos en la jornada precedente. Las protagonistas, Michaela Drummond, Bryony Botha, Holly Edmondston y Kirstie James.

Welsford volvía a subir a lo más alto del podio al ganar un scratch que parecía cantado para el portugués Rui Oliveira… si la carrera hubiera durado media vuelta menos. Pero el australiano supo imponer su potencia -pese a que venía de correr la persecución- para superar al neerlandés Roy Eeefting y al neozelandés Thomas Sexton. La carrera tuvo pocos ataques de entidad, sin que hubiera ningún corredor o grupo capaz de abrir hueco. Eso sí, a falta de diez varios ataques de gente como el bielorruso Yauheni Karaliok, el griego Christos Volikakis, el irlandés Felix English o el austriaco Stefan Matzner rompierton la carrera, dieron paso a la valiente intentona del portugués a falta de seis vueltas y a la demostración del ‘aussie’. Oliveira era superado por cuatro ciclistas y terminaba quinto.

Tania Calvo, octava, “con sabor agridulce”

En cuanto a la participación española en esta segunda jornada estuvo reducida a Tania Calvo y Juan Peralta, con la alavesa en una notable octava posición final en velocidad, al llegar a cuartos de final.

La alavesa marcaba el 21º tiempo en la clasificatoria de los 200 (11.097) en una serie en la que ya se veían las aspiraciones de Stephanie Morton (10.564) y de Sarah Lee Wai Sze (10.662) y en el que se destacaban las jóvenes Mathilde Gros (10.685) y Lee Sophie Friedrich (10.712) como siguientes clasificadas. Calvo superaba la primera ronda ante la canadiense Lauriane Gesnest y sobre todo daba la sorpresa al clasificarse en octavos, por descalificación de la rusa Daria Shmeleva, quinta cabeza de serie, que se había impuesto pero fue descalificada por salirse del pasillo de sprinters. En cuartos, ante la alemana Friedrich no tenía ninguna opción cayendo en dos mangas.

“Quizá me pasé un poco con el desarrollo en los 200 y lo hubiera hecho mejor con una punta menos -decía la española- Pero al final no me fue mal en los enfrentamientos. La rusa es una corredora que se mueve mucho sobre la bici, se ha salido de su trayectoria y para eso está la normativa. Las sensaciones han sido buenas según pasaba las rondas y en cuartos me ha quedado un sabor agridulce, porque pienso que he podido hacer más, ya lo he luchado. Me he sentido combativa en todo momento”

En cuanto a Peralta no podía pasar de las repescas en el nuevo formato del keirin -con una incomprensible ronda adicional, lo que supone más cansancio para unos corredores que ya compiten en bastantes pruebas-, y que no supuso ningún problema para los favoritos que llegaban a las semifinales. “En mi serie solo he podido ser tercero y en la repesca me ha tocado quinto, se ha ido muy deprisa y no he podido coger la posición, aunque el sprint ha sido muy apretado y se ha decidido por la foto finish”.

Mathijs Buchli hizo valer su potencia en la final y se llevaba su segundo oro de estos Mundiales, por delante del sorprendente japonés Yudai Nitta y del alemán Stefan Botticher. Pese a sus ganas, el australiano Matthew Glaetzer no pudo ser protagonista, a pesar de intentar sorprender con un ataque lejano justo después de que la derny abandonase la pista.

Clasificaciones

Foto: Twitter UCI Track

El equipo masculino de velocidad de los Países Bajos, el femenino de Australia y la británica Elinor Barker, en scratch, son los primeros campeones en el Mundial de Pruszkow, que hoy se ha iniciado en esta localidad polaca. En lo que se refiere a España, la dupla femenina formada por Helena Casas y Tania Calvo quedaba novena, el trío masculino con Alejandro Martínez Juan Peralta y Pepe Moreno, decimotercero, mientras que Irene Usabiaga era undécima en el scratch. 

Países Bajos no solo demostró que es la indiscutible potencia en la velocidad masculina sino que en la final se quedó a menos de una décima (41.923) del record del mundo establecido en Aguascalientes por Alemania (41.871),lo que habla a las claras del gran momento de un equipo formado por Roy Van den Berg, Harrie Lavreysen y Jeffrey Hoogland, quinen dejaba paso a Matthisj Buchli en la primera ronda. Francia (Gregori Baugé, Sebastin Vigier, Quentin Lafargue/Michael D’Almeida) se quedaba a casi un segundo en la final (42.889), pero mejoraba su bronce del año pasado, en un torneo en el que la sorpresa fue Rusia (Alexander Sharapov, Denbis Dmitriev y Pavel Yakushevskiy) accedía al podio por primera vez en lo que va de siglo en esta disciplina, al superar en la final B a Alemania, en un torneo en el que selecciones como Gran Bretaña, Australia y sobre todo Nueva Zelanda decepcionaban, siendo quinta, sexta y octava, respectivamente, aunque los ‘aussies’ no alineaban en ningún momento a su principal hombre, Mathew Glaetzer, orientado hacia las pruebas individuales.

Foto: Australia Cycling

España, por su parte, no podía estar al mismo nivel que en los dos Mundiales precedentes, décima, aunque se quedaba cerca del objetivo que se habían marcado en tiempo: 44.544 frente a los 44.4 de su mejor tiempo de la temporada.

La versión femenina se presentaba más abierta, aunque ya desde la clasificatoria Australia (Karlie McCulloch y Stephanie Morton) y Rusia (Daria Shmeleva y Anastasiia Voinova) se presumían como las más fuertes, hasta verse las caras en la final, en donde se imponían con relativa comodidad las oceánicas 32.255 a 32.591, recuperando un cetro que no tenían desde 2011. La sorpresa de la prueba fue México, que con Luz Gaxiola, Jessica Salazar y Yuli Verdugo, se plantaba en la final B, aunque no podía superar a una Alemania, que con su nueva formación -Miriam Welte y Emma Hinze, se mostró muy sólida.

También en este torneo hubo bastante fiscos, aunque en este caso en la clasificatoria y no en primera ronda, como los hombres, con equipos como Polonia, Ucrania o Gran Bretaña sin superar el corte, lo que propició que España, aun sin hacer un buen tiempo (33.802) se quedase novena, a apenas 37 milésimas de superar a China, octava.

Foto: Twitter UCI Track

La tercera final del día -aunque la primera en orden cronológico- fue la de scratch en la que Elinor Barker sorprendía lanzando su sprint sin que la neerlandesa Kristen Wild tuviera tiempo -y fuerzas- para remontarla, demostrando que quizá no esté al mismo nivel que el año pasado,aunque su prueba objetivo es el ómnium. El podio lo completaba una habitual como Jolien D’Horre, por tercer año consecutivo medallista, pero aún sin pisar lo más alto.

La española Usabiaga se dejó ver bastante, siendo protagonista de uno de los pocos ataques de la prueba antes de la llegada, en compañía de la austriaca Verena Eberhardt, aunque sin pasar de la media vuelta de ventaja. Al final tuvo la suerte de burlar una caída de diez corredoras, que no afectó a las que estaban por delante, aunque quizá si influyó en que ciclistas como Amelie Didericksen, afectada por este motivo, no pudieran haber jugado su suerte.

La jornada se completó con el inicio de las pruebas de persecución. El nivel de la masculina quedó claro con la marca de corte de los ocho mejores, en 3:58.474, a la que no llegaron países como Bélgica, Italia -vigentes campeones continentales-, Rusia o Francia.

Australia marcaba el mejor tiempo en la clasificatoria (3:52.152) por delante de Gran Bretaña (3:53.879) con Dinamarca y Nueva Zelanda en las siguientes posiciones como era de esperar. En la primera ronda, las dos selecciones favoritas bajaron sus tiempos a 3:51 confirmando su presencia en la final. Dinamarca mantuvo su nivel para plantarse en la lucha por el bronce; no así los ‘kiwis’ que destrozaron su equipo en su prueba y se quedaron fueras de esa final, en la que sí estará Canadá (3:54.6) demostrando su progresión.

En cuanto a las féminas, Australia y Gran Bretaña ratificaron su condición de favoritas, con unos tiempos de 4:14-915 y 4:15.618, muy por debajo del resto de las selecciones y mañana tendrán que superar a Italia y Nueva Zelanda para ratificar su pase a las finales. Para la final B se tendrán en cuenta los tiempos de las dos selecciones derrotadas, así como el de los enfrentamientos Canadá-Bélgica y Alemania-Estados Unidos, quienes, sin Chloe Dygert, estuvieron muy lejos de las prestaciones del año pasado (4:25.387 lo que les suponía la séptima plaza)

Clasificaciones

Países Bajos, favoritos en velocidad

26 febrero

Las velocidades por equipos y el scratch femenino depararán los tres primeros ‘arco iris’ en los Campeonatos del Mundo de pista, que mañana se inician en Pruszków (Polonia). En esta primera jornada, que se extenderá de 13:00 a 16:15 y de 18:00 a 21:36 –esta sesión ya con las cámaras de Eurosport en directo- también significará el inicio del torneo de persecución por equipos.

Ganadores de las cuatro pruebas de la Copa del Mundo que han disputado, y vigentes campeones del Mundo y de Europa, que Países Bajos no lograrse el triunfo en la velocidad por equipos masculina sería una auténtica sorpresa, con un trío impresionante con Harrie Lavreysen, Jeffrey Hoogland y Matthijs Buchli y Roy Van den Berg alternándose como tercer hombre. Eso sí, Nueva Zelanda –campeones en 2014, 2016 y 2017 y subcampeones olímpicos- quieren demostrar que lo del año pasado fue solo un borrón, y su clásica formación con Ethan Mitchell, Sam Webster y Edward Dawkins quiere volver por sus fueros. Australia (Patrick Constable, Nathan Hart y Mathew Glaetzer) también tiene mucho que decir; Gran Bretaña, con Philip Hindes, Ryan Owens y Jason Kenny –con Jack Carlin y Joe Truman como alternativas- defiende la plata del año pasado, sin olvidar su condición de campeones olímpicos, lo mismo que Francia el bronce, por lo que sigue apostado por Gregory Baugé como arrancador, precediendo a Sebastien Vigier y con Quentin Lafargue y Michael D’Almeida alternándose en el cierre.

¿Y España? Alejandro Martínez, Pepe Moreno y Juan Peralta afrontan su tercer Mundial consecutivo, intentando estar en torno al décimo puesto que lograron en los dos anteriores, y que, como nos decía el navarro, “sería un gran resultado”.

Irene Usabiaga © RFEC

Entre las mujeres, la gran ausencia, desgraciadamente irreversible, de Kristina Vogel deja a Alemania con menos opciones de revalidar el oro logrado en Apeldoorn, aunque tanto Emma Hinze como Pauline Grabosh han demostrado compenetrarse bien con la veterana Miriam Welte. Rusia, con las tradicionales Daria Shmeleva y Anastasiia Voinova, intentará recuperar el título logrado en 2017 –de hecho son las actuales campeonas continentales-, con permiso de Australia (Stephanie Morton y Karlee McCulloch), Países Bajos (Shane Braspenninnck, Kyra Lamberink, Laurine Van Riessen) y la renovada China, sin Tianshi Zhong, pero con Yufang Guo y Junhong Lin.

Para Tania Calvo y Helena Casas, las opciones de estar entre las ocho mejores como sucedía en el ciclo olímpico anterior son muy remotas, casi imposibles, por lo que alcanzar el noveno puesto del año pasado sería un resultado aceptable.

Las tres rondas de ambas competiciones tendrán lugar en la sesión de tarde.

La tercera final del día será la de scratch, para la que está inscrita la neerlandesa Kirsten Wild, dispuesta a comenzar a repetir su serie mágica del año pasado cuando ganó tres otros y una plata –madison-. Alexandra Manly (Australia), Jolien D’Hoore (Bélgica), Amelie Diediricksen (Dinamarca), Elinor Barker (Gran Bretaña) y sobre todo Martina Fidanza, ganadora de dos pruebas y la general de la Copa del Mundo, serán sus principales rivales, en una prueba en la que Irene Usabiaga intentará estar al nivel de Cambridge y Hong Kong y meterse entre las diez mejores.

Gran Bretaña vs Australia

La primera sesión se completará con las persecuciones por equipos. Tanto las cuartetas masculinas como las femeninas –entre las que no habrá representación española- tendrán sus clasificatorias por la mañana, aunque solo los hombres afrontarán la mal llamada primera ronda en la sesión vespertina, dejando las finales para el jueves, mientras que las féminas harán estas dos rondas pasado mañana.

Gran Bretaña –vigente campeona- y Australia –que estableció un nuevo récord del mundo el pasado mes de abril con 3:49.804- son las grandes favoritas entre los hombres, pero tanto Dinamarca, como Nueva Zelanda e incluso Canadá han bajado de 3:52 y posiblemente tengan que volver a hacerlo en Pruszkow si quieren luchar por las medallas.

En cualquier caso, la lucha no se queda ahí, ya que está en juego la clasificación olímpica y estar entre los ocho mejores es más necesario que nunca, algo a lo que aspiran también Alemania, Italia, Bélgica, Francia, Rusia, Suiza o Corea. El corte estará por debajo –quizá muy por debajo- de los 4:00.

Entre ellas, la ausencia de Chloe Dygert deja con muy escasas posibilidades a la cuarteta norteamericana de enlazar su tercer título consecutivo, y más ante la progresión de los equipos británico –que ganó tres de las cuatro mangas de la Copa del Mundo en las que participó- y australiano, con Italia, Nueva Zelanda e incluso Canadá aspirando también, junto a las norteamericanas, claro, a un lugar en el podio.

Inscripciones y clasificaciones

25 febrero

A diferencia del año pasado, cuando Australia se ‘saltó’ el Mundial para centrarse en los Juegos de la Commonwealth que disputaban ‘en casa’, el Campeonato del Mundo de 2019, que tendrá lugar del miércoles 27 de febrero al domingo 3 de marzo en Pruszkow (Polonia), es una cita obligada para todos los países y todos los pistards que quieren estar en agosto de 2020 en los Juegos Olímpicos de Tokio.

De esta forma 49 naciones y unos 450 deportistas -260 hombres y 190 mujeres, aproximadamente-, de los que cinco corredores y cuatro corredoras son españoles, se darán cita en el velódromo de esta ciudad en la periferia de Varsovia, que ya acogió este evento hace diez años, aunque con una perspectiva muy distinta entonces al ser el año post olímpico.

Ni que decir tiene que las seis pruebas olímpicas, en sus versiones masculinas y femeninas, es decir velocidad individual y por equipos, keirin, persecución por equipos, ómnium y madison son las que mayor competencia deparan.

En el caso de las pruebas cortas, todo parece indicar que Países Bajos seguirá dominando en la velocidad por equipos masculina, habida cuenta de sus cuatro triunfos en otras tantas pruebas de la Copa del Mundo, aunque espera poder ratificarlo en las pruebas individuales, tanto con Mathijs Buchli en el keirin –donde no estará el vigente arco iris, Fabián Puerta, por dopaje-, como en la velocidad con el propio Buchli, Harrie Lavreysen y Jeffrey Hoogland, que no defenderá su título en el kilómetro para centrarse en esta disciplina, en la que el campeón saliente, Mathew Glaetzer, es el gran favorito, visto lo visto en lo que va de año. Por equipos, Gran Bretaña, Australia, Francia y Nueva Zelanda –tras el fiasco del año pasado- son otros outsiders, en un Mundial en el que no estarán dos ilustres veteranos como François Pervis, eclipsado por los nuevos valores galos, y como Max Levy, por querer estar presente en el nacimiento de su tercer hijo.

Las opciones de España de estar en el ‘corte’ de los ocho mejores son prácticamente nulas, mientras que, en las pruebas individuales, la única esperanza es que Juan Peralta pueda tener unos enfrentamientos favorables y plantarse en semifinales. Todo lo que esté por encima de eso sería un logro mayúsculo.

Vogel, ausencia irreversible

La alemana Kristina Vogel

Entre las mujeres, la gran ausencia, desgraciadamente irreversible, será la de Kristina Vogel, aunque quizá ello conlleve una mayor igualdad. Por equipos, Alemania ha demostrado que puede defenderse con mayor o menor éxito ante Rusia, con el dúo Anastasia Voinova-Daria Shmeleva como grandes favoritas, Australia, Países Bajos y la recuperada China.

La coreana Sarah Lee Wai Sze y la australiana Stephanie Morton han sido las más destacadas en lo que va de campaña en velocidad, mientras que en keirin habrá que ver la progresión de la ex patinadora neerlandesa Laurine Van Riesen o si la vigente campeona, la belga Nicky de Grendele, está al nivel anterior a su caída.

Para Tania Calvo y Helena Casas los tiempos de estar entre las ocho mejores parecen haber pasado definitivamente, visto lo visto en la Copa del Mundo, por lo que estar en torno al puesto noveno o décimo sería un aceptable resultado, que desgraciadamente no serviría de mucho de cara a la clasificación olímpica. En las pruebas individuales –la alavesa en la velocidad, la catalana en el keirin- las opciones tampoco son mucho mayores, aunque Casas ha sido dos veces semifinalista en esta prueba, y en el no olímpico 500 Calvo debería estar, como los años anteriores, en la final de las ocho mejores.

Gran Bretaña y Australia, en las persecuciones

Pasando al fondo, la ausencia de Chloe Dygert deja con muy escasas posibilidades a la cuarteta norteamericana de enlazar su tercer título consecutivo, y más ante la progresión de los equipos británico y australiano. Precisamente una de las grandes incógnitas será ver como se reparten las pruebas las ciclistas del Reino Unido, especialmente en lo que se refiere a sus grandes estrellas, Laura Kenny –que parece ser la que al final haga el ómnium- y Katie Archibald, así como seguir viendo la progresión de la joven escuadra italiana, con Letizia Paternoster al frente, y ver si la australiana Nettie Edmondson vuelve por sus fueros en la ‘combinada’.

No obstante, la gran estrella puede volver a ser Kirsten Wild, capacitada para repetir los tres oros de Apeldoorn –ómnium, scratch y puntuación- e incluso a mejorar la plata de la madison lograda con Amy Pieters, aunque esta prueba promete un gran duelo con británicas, australianas, italianas, belgas (Lotte Kopeky-Jolien D’Hoore) e incluso danesas (Amelie Diedirecksen-Trine Schmidt), como demostraron en el Europeo. En lo que se refiere a la española Ana Usabiaga, intentará seguir en su particular e injusta lucha por ir arañando puntos para estar en Tokio 2020

Y volviendo de nuevo a los hombres, destacar el altísimo nivel vivido en las Copas del Mundo, aunque aquí lógicamente no estará uno de los grandes protagonistas de la temporada, el equipo comercial británico Huub Wattbike. Gran Bretaña –vigente campeona- y Australia –que estableció un nuevo récord del mundo el pasado mes de abril- son las grandes favoritas, pero tanto Dinamarca, como Nueva Zelanda e incluso Canadá han bajado de 3:52 y posiblemente tengan que volver a hacerlo en Pruszkow si quieren luchar por las medallas.

Ni que decir tiene que España no será de la partida: tras el espantoso 4:15 del año pasado, la cuarteta no ha competido en la presente Copa del Mundo, con muy buen criterio, aunque lo que resulta incomprensible es que no se esté trabajando ya para armar un nuevo equipo para París 2024.

Relevo entre la pareja española. Foto: UCI

Las únicas esperanzas de medalla llegan por parte de Albert Torres y Sebastián Mora, tanto por parte del primero en el ómnium como de la dupla en la madison, sin olvidar el debut del castellonense en la puntuación, sobre el que incidiremos más adelante.

Ni que decir tiene que Torres –ganador de la prueba de Saint Quentin y segundo en Berlín- es uno de los grandes favoritos en el ommium, con permiso del actual campeón del mundo, el polaco Szymon Sajnok, del francés Benjamin Thomas, del británico Ethan Hayter, del australiano Sam Welsford o del neerlandés Van Schip

En cuanto a la madison, destacar que Dinamarca ganó las cuatro pruebas de la Copa del Mundo que ganó, ¡con tres duplas diferentes! Por ello habrá que tenerles en cuenta, sea cual sea la pareja titular. Torres y Mora serán una de las parejas relevantes, por su condición de vigentes subcampeonas del mundo, junto con los alemanes Roger Kluge-Theo Reinhardt, los australianos Leigh Howard-Kellend O’Brien o los belgas Kenny De Ketele-Robbe Ghys, sin olvidarnos de países como Francia o Italia.

Persecución de lujo

Aparte de las pruebas olímpicas, hay algunas que este año congregan un gran interés, destacando por encima de todas la persecución masculina en la que se enfrentarán los dos hombres que en los últimos meses han realizado las mejores marcas de la historia, el norteamericano Ashton Lambie, record del mundo oficial, en la altitud de Aguascalientes (4:07.251) y el británico John Archibald, plusmarquista oficioso a nivel del mar (4:09.584), sin olvidarnos del actual campeón, el italiano Filippo Ganna, del germano Domenic Weinstein o del portugués Ivo Oliveira, aunque no podrá alinearse Jordan Kerby, campeón en 2017 entonces con Australia y ahora en ‘espera’ hasta que se consolide reglamentariamente su nueva nacionalidad neozelandesa, ni incomprensiblemente Charlie Tanfield, ya que Gran Bretaña ha renunciado a alinear un segundo corredor en esta prueba.

Por el contrario, la versión femenina presentará dos notables ausencias confirmadas, la de la ganadora y estratosférica recordwoman en Apeldoorn, la ya mencionada Chloe Dygert (3:20.060), y la de la segunda clasificada, Annemiek Van Vleuten, y parece que también la de Katie Archibald, por lo que se pierde la posibilidad de ver por primera vez en la historia a dos hermanos en lo más alto de los podios de cada sexo.

En el resto de las pruebas, veremos cómo se defiende Sebastián Mora en una puntuación que no deja de ser un objetivo secundario en este Mundial y en la que Cameron Meyer intentará conseguir su sexto arco iris. En féminas, destacamos la presencia de Irene Usabiaga en puntos y scratch.

Programa sin apenas cambios

El programa del Mundial será muy similar al del año pasado, en lo que se refiere a la distribución de pruebas: cinco jornadas, con veinte títulos en juego y, como ocurre desde 2017, con absoluta paridad entre hombres y mujeres: velocidad individual y por equipos, keirin, kilómetro/500 metros, persecución individual y por equipos, scratch, puntuación, omnium y madison.

Todas estas jornadas tendrán una doble sesión: una matinal centrada en clasificatorias y primeras rondas, y una vespertina desde mediada la tarde, salvo la dominical, que se adelanta a las 14:00, todas ellas ofrecidas en Eurosport en directo, con los comentarios de Luis Jiménez y Román Mendoza.

El miércoles (13:00 a 16:15 y 18:00 a 21:36) conoceremos los primeros campeones, en las dos velocidades por equipos y el scratch femenino; el jueves (14:30 a 17:10 y 18:30 a 21:21) se completarán las competiciones de persecución por equipos masculina y femenina, y el scratch y el kerin, ambos para hombres.

La velocidad femenina terminará el viernes (15:00 a 17:20 y 18:30 a 22:09), justo el día que se disputan el kilómetro, la persecución y la puntuación para ellos y el omnium para ellas.

El sábado (12:00 a 15:58 y 17:00 a 20:14) será el turno del omnium masculino y del comienzo de la velocidad, así como tres pruebas femeninas (500 metros, persecución y madison), para terminar la velocidad masculina y el Campeonato el domingo (12:00 a 13:14 y 14:00 a 16:48) con la madison masculina y la puntuación y el keirin femenino.

Programa de competiciones

Preinscripción completa

Comentar

Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos necesarios están marcados *

*