Nairo Quintana siente que han cambiado muchas cosas para él desde que Movistar le fichó en 2012 tras debutar en 2009 con el continental Boyacá es para vivirla. “He ganado mucha madurez y tranquilidad, y tengo un equipo muy sólido que me ayuda en todo lo que puede. Mil cosas han cambiado, todas para bien”. Por ello y por su excelsa temporada, siente que este sí puede ser el año del asalto al Tour de Francia: “Hemos hecho las cosas bien, hemos tenido buenas actuaciones en todas las vueltas por etapas donde hemos estado, ganando tres de ellas y siendo podio en San Luis y País Vasco. Estamos bien preparados”.
“Descansé un poco más en el invierno para tener mayor sensación de frescura y durante la temporada se ha demostrado que fue un acierto. Ganar dos carreras WorldTour que no estaban en mi palmarés fue emocionante y me dio tranquilidad. El equipo se ha adaptado cada vez mejor a mí, y yo a ellos, y siempre doy lo mejor de mí”, asegura el de Cómbita, que procura siempre, consciente de su enorme popularidad, ofrecer “una sonrisa para todo el mundo”.
Del recorrido le gustan “las montañas. Este Tour tiene unas llegadas en alto muy bonitas, con las que me identifico. Andorra será una jornada bastante dura, con mucho desnivel, que ya hará bastante daño en las piernas. Al Mont Ventoux espero llegar en mejor forma que en 2013 y hacerlo aún mejor. Y llegar a Morzine me llena de emoción: allí logré mi primera gran victoria, antes rivales muy importantes, en el Dauphiné de 2012”. Tampoco le disgustan las cronos: “En la Caverne habrá que ir con cabeza, será muy complicada tras Pirineos y Ventoux y realmente exigente; la de Megève, aunque lo parezca, no será una cronoescalada como tal y tampoco tan decisiva como se presume, pues quedarán etapas importantes, pero quien tenga mal día perderá bastante tiempo”.
Nairo asume que “cometimos un error en Holanda en 2015 y este año no nos vamos a descuidar”. Teme al “estrés de competición, al peligro y las caídas”, pero sabe que tendrá “un equipo potente, corredores hábiles para manejarse en el llano y gente de calidad en la montaña”. Entre ellos, un Alejandro Valverde que a buen seguro infundirá “respeto en los rivales” y le trae “mucha alegría. Es un gran refuerzo que dará el ciento por ciento para conseguir el #SueñoAmarillo”, según afirma al grupo de Unzue.
“Froome y Contador son los principales rivales, pero hay otros corredores importantes que no debemos descuidar”, subraya un Quintana que se confiesa nada supersticioso, “aunque a un amigo le prometí hace años que si ganaba le llevaría un leoncito del podio”. “Agradezco todos los mensajes de apoyo en las redes, me llenan de emoción y fuerzas para seguir luchando por ese #SueñoAmarillo. ¡Nos vemos en París!”