«Alguna lágrima de felicidad sí se ha escapado antes de subir al podio», comentó Nairo Quintana a su equipo Movistar tras la penúltima etapa que le ha dado prácticamente el triunfo final en el Giro de Italia, el de su debut. «Estoy muy contento: he podido lograr un objetivo muy importante en mi vida; estar a punto de vencer, en esta tierra tan bella, con todos los aficionados, tanto italianos como colombianos y de otras partes del mundo que me han dado su apoyo… me siento orgullosísimo.
Y lógicamente espera que este domingo no pase nada y suba al podio oficial y definitivo. «Ya tenemos el 99% del triunfo. Sólo queda el día de mañana, que sabemos que es una etapa relativamente llana y, como hemos visto hoy, el equipo también está muy fuerte. Esperamos terminar un Giro tan excelente confirmando estos buenos resultados y poder levantar los brazos al cruzar la última raya».
En cuanto a la etapa de hoy con final en uno de ls puertos más duros de Europa, el colombiano hizo su balance. «Zoncolan ha sido un puerto bastante exigente, muy ‘impegnativo’ como dirían aquí. Todos los días hemos ido bastante rápido y al final la gente ha llegado bastante cansada a la subida. En general estamos felices todo el equipo.
Y desvela las dificultades físicas que pasó los primeros días. «Al finalizar la primera semana y en el inicio de la segunda estuve bastante enfermo. Tenía miedo de no poder estar en condiciones, tuve unas etapas de transición y sufrí bastante, pero he intentado recuperarme y ahora el cuerpo está bien, y con la maglia rosa y una ventaja al segundo clasificado considerable, estoy tranquilo».