Movistar Team ha disfrutado este lunes la primera jornada de descanso real del Giro de Italia 2014 -segunda, contando el traslado que los corredores hubieron de afrontar hace siete días desde Irlanda hasta el sur de la Península Itálica- en Fiorano Modenese, en el corazón de la Emilia-Romaña, desde donde sus nueve corredores han rodado brevemente por la mañana para disfrutar después del merecido reposo y cuidados con el que el staff de la escuadra telefónica les prepara para seis días, los próximos de la Corsa Rosa, que incluirán una importante contrarreloj de 42 km en Barolo (jueves, 22) y las llegadas en alto de Oropa (sábado, 24) y Plan di Montecampione (domingo, 25). El líder de la escuadra azul, Nairo Quintana -9º en la clasificación general-, ofrece su balance a punto de llegar al ecuador de la carrera:
El líder colombaino afirmó que «éste era un día que estábamos esperando porque llevamos ya nueve días dando pedales y la fatiga se va notando. Además con las dos últimas etapas, que han sido duras, y especialmente por los golpes de la caída. Necesitábamos un descanso físico pero sobre todo mental, de desconectar un poco de la tensión del día a día de la carrera. De momento el balance es bueno porque pese a no encontrar mis mejores sensaciones, no he cedido tiempo con los favoritos excepto con Pozzovivo y eso es importante. Ya hemos pasado casi la mitad del Giro y seguimos ahí; otros como Purito o Daniel Martin ya no están a causa de las caídas. Por eso hay que dar gracias, porque aunque yo tengo todavía dolores y un hematoma grande, estoy dentro de carrera y entre los diez primeros».
Y pide paciencia y tranquilidad ante lo que queda. «Lo importante estos días va a ser intentar recuperarme, que sería la mejor noticia. Queda lo más duro por delante y las etapas más exigentes. Creo que se me ha juntado un poco todo: el mal tiempo, quizás algo más de ritmo, la caída… también hay que ver que soy joven, la primera ‘grande’ como líder… Como dije antes de empezar, hay que estar tranquilos porque aún queda mucho por delante. Evans está claro que está muy fuerte, pero otros como Rigoberto, Majka o Pozzovivo también están muy fuertes y tienen equipos muy potentes. Yo sigo contando con un gran equipo a mi lado y espero también que mis compañeros se recuperen porque casi todos también tienen heridas y que podamos estar recuperados para cuando lleguen las etapas que pueden jugar a nuestro favor».