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Nicolás Sáenz, ilusionado por poder correr en Getxo / © Gorama
Cuando era un adolescente, la S.C. Punta Galea le dio la oportunidad de formarse como corredor en sus filas. Cada verano venía de Colombia para competir junto al equipo vizcaíno. Por aquel entonces, Nicolás Sáenz (Efapel) sólo era un chico que soñaba con ser profesional. Hacía el calendario junior pero, cada 31 de Julio, se apostaba en una esquina para ver pasar al pelotón que disputaba el Circuito de Getxo, organizado por su antiguo Club. Este próximo 2 de agosto, Sánez tendrá la oportunidad de ser parte de ese pelotón. Será su «carrera de casa».
El joven escalador colombiano lleva días mirando el calendario. Las ganas de ponerse un dorsal de nuevo tras el parón sanitario, son infinitas. Pero además, hacerlo en Getxo, es un aliciente aún mayor: «Es la primera carrera después del parón del COVID y es la carrera de casa y siempre me había hecho ilusión. Es la carrera que organiza el Punta Galea, que han sido los que siempre me han ayudado cuando estaba aquí. Tengo mucha ilusión y ganas de correrla, desde que era un juvenil. Yo me siento bien pero hay que esperar a ver que tal salen las cosas», explica con una sonrisa que delata su complicidad con el club vasco.
Nico, a pesar de su origen colombiano, lleva mucho tiempo residiendo en el País Vasco, por lo que cuenta con una pequeña ventaja: «El circuito lo estuve viendo el año pasado y recuerdo muchas partes del recorrido, pero este año han puesto una subida más, que ya la he hecho, porque hacía series por allí cuando era juvenil y vivía en Getxo, así que entre esta semana y la que viene volveré a pasar por allí», admite.
Aún así, el perfil de la carrera, tradicionalmente dibujado para un hombre rápido que pase bien la media montaña, no se adapta a su fina silueta de escalador, por lo que acudirá en labores de apoyo: «Aún no sé mi labor en la carrera pero igualmente es para un hombre rápido que se defienda en la media montaña. En nuestro equipo Rafa Silva es el que cumple el perfil para esta carrera. Yo soy escalador nato e igual se me queda un poco corto el repecho,por lo que intentaré hacerlo bien ayudándole en lo que pueda», desvela.
Tras la carrera, los objetivos se centrarán en el gran compromiso del equipo; la Volta a Portugal: «Es mi gran objetivo poder estar en el equipo que la dispute. Somos doce corredores y hay que ganarse el puesto. Todos tienen un nivel muy bueno. Si lo consigo y si todo sigue normal, espero hacerlo de la mejor forma posible, aunque aún es una incertidumbre», concluye.
A una semana escasa, Nico cumplirá otro de sus sueños como ciclista, aunque sea pequeñito. Ser un integrante del pelotón que cada verano veía pasar desde una esquinita.
