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La victoria de Niels Albert ©Superprestigio
Cuando a finales de la temporada 2006/07 Niels Albert se hizo con sus dos primeras grandes victorias como profesional en Leonhout (Azencross) y Oostmalle (Sluitingsprijs), ambos puntuables para el Trofeo Gazet van Antwerpen una luz se perfilaba, por fin, en el horizonte. Por aquel entonces –qué poco cambian algunas cosas– un tal Sven Nys imponía su tiranía durante todo el invierno. Cualquier triunfo parcial –las generales de las Challenges se veían como algo imposible– suponía para el que lo consiguiera ser considerado como el hombre que podría acabar con el dominio del corredor de Baal. Cuando Albert lo hizo con solo 20 años, Bélgica estalló.
Llamado a ser el sucesor natural de Mario DeClercq (retirado un año antes), su progresión durante los primeros años parecía imparable. En su segunda temporada ya logró nueve victorias y, más importante en un mundillo tan local como es el del ciclocross, el bronce en el nacional belga por detrás de Nys y un Wellens al que no tardaría en desplazar de ese segundo puesto en las preferencias de los belgas. Guapo, joven y simpático, era percibido como una suerte de Tom Boonen del ciclocross.
Todo estalló el día 1 de febrero de 2009 en Hoogerheide (Holanda). Tras una temporada decepcionante en cuanto a prestaciones en las tres grandes challenges (una única victoria en cada una de ellas), el de Bonheiden se hacía con su primer Campeonato del Mundo.
La siguiente campaña, la 2009-2010 fue, de alguna manera, el inicio del fin del sueño. Fue su mejor año en cuanto a número de victorias, con 16 triunfos en total: cuatro en Copa del Mundo y en el Superprestigio y dos en el GvA. Sin embargo, no se llevó ninguna de las challenges y no subió al podio en ninguna de las dos grandes citas de un día: el Mundial y el Nacional. Esa debía de haber sido su gran temporada. Por primera vez en cinco años Sven Nys no se llevaba ni la Copa del Mundo ni el Superprestigio. Todos hablaban del inicio de su ocaso, pero el que se llevó el gato al agua fue el checo Stybar. Allí donde todos esperaban la irrupción del sucesor belga del Caníbal, apareció un checo. Fue casi un insulto. Un anticlímax.
La Copa del Mundo llegó en la 2010-2011. En la 2012-2013 repetiría en esa challenge (consiguiendo una sola victoria en Pilsen) y se anotaría el Bpost (antiguo GvA) vestido con el maillot arco iris. Sumó trece victorias en total, el segundo mejor registro de su carrera. Era su segunda gran oportunidad. Llegaba el momento de confirmarse.
Pero la eterna promesa no fue capaz de confirmarse nunca. Bien sea por los primeros síntomas de la enfermedad que ahora se le ha detectado o por incapacidad deportiva, su último año en el ciclocross ha sido un fiasco. Sin triunfos de verdadera relevancia y muy lejos en el Mundial (20º), Albert parecía confirmar que, de alguna manera, cuando más presión se acumulaba sobre sus hombros, mayores eran las opciones de que fallara.
Pese a todo, su nombre siempre sonaba. Siempre había que tenerlo en cuenta para cuanta prueba contara con su participación. Como todos los grandes campeones de un deporte, incluso en un mal día podía ser capaz de dar la sorpresa. Una sorpresa tan grande como la que protagonizó el lunes, 19 de mayo de 2014 cuando anunció su retirada definitiva del ciclocross. Una rara enfermedad cardiaca (cicatrización del músculo del corazón) le obligaba a colgar la bicicleta. Guy De Schutter, médico del BKCP-Powerplus fue muy claro al explicarlo: “no queda otro remedio. En un control rutinario, muy normal antes del inicio de cada temporada, hemos detectado ciertas anomalías que podían ser causadas por un problema cardiaco.
Inmediatamente, derivamos al corredor al Hospital de Amberes. Allí confirmaron nuestro diagnóstico, pero pedimos una segunda opinión en Lovaina, que también coincidió con los dos diagnósticos anteriores. Niels no puede hacer ningún tipo de ejercicio. En el fondo, ha tenido mucha suerte. Si no lo hubiésemos detectado, las consecuencias podrían haber sido fatales”.
Con solo 28 años y con su mejor momento como corredor todavía por llegar, Albert se ve obligado a dejar la actividad que ha marcado su vida desde que era un niño. “Duele mucho tener que dejar mi carrera deportiva de esta manera. Lo que me espera en el futuro es una incógnita, pero lo que no tengo duda es que ahora voy a atravesar un bache muy profundo”.
Vídeo de la rueda de prensa de Niels Albert
