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Niels Albert en una imagen de archivo / © Belga
Han pasado algo más de tres años desde que Niels Albert, el hombre llamado a suceder a Sven Nys en la cima del ciclocross, dijera adiós de manera precipitada a causa de una enfermedad cardiaca. Le costó aceptarlo. Primero, porque hubo quien le abrió la puerta de la esperanza con un tratamiento alternativo al propuesto por sus médicos. Luego, porque los deportistas, sobre todo cuando están en lo más alto de su carrera, pueden aceptar que un contratiempo de este tipo pueda llegar a ser una situación irresoluble. Tardó apenas cuatro meses en volver a los circuitos, esta vez como entrenador, pero no sería hasta el mes de diciembre cuando aceptó de forma definitiva que su destino no estaba encima de la bicicleta.
Desde entonces, Albert ha desarrollado un muy exitosa carrera como preparador, especialmente junto a Wout Van Aert, el hombre que, junto a Mathieu van der Poel, domina los inviernos. Sin embargo, a falta de sólo once días para el comienzo de la nueva temporada, ha tenido que ser operado de urgencia para implantarle un desfibrilador interno debido a una recaída en sus problemas cardiacos.
El invierno echará a andar el próximo día 17 en Estados Unidos, pero Albert fue intervenido el pasado martes en un hospital de Brujas después de haber sufrido arritmias en uno de los últimos días de sus vacaciones. Una situación que reconoce que “me ha dado mucho miedo después de que mi corazón se desbocara un par de veces”.
Ese fue el motivo, tal y como él mismo explica, por el que “el martes fui operado de urgencia para implantarme un desfibrilador” en una intervención realizada por el cardiólogo de origen español Pedro Brugada, el mismo galeno que intentó salvar la carrera deportiva del ex ciclista con un tratamiento novedoso.
Este contratiempo implica que Albert no podrá viajar a Estados Unidos para estar junto a sus corredores en las dos primeras citas de la Copa del Mundo, una situación que no le preocupa. “Estoy contento de haberme sometido a la operación. Me da algo de tranquilidad a mí y, sobre todo, a mi familia. Si algo me pasa, ese aparatitio estará ahí para salvarme y ahora, mi novia puede dormir tranquila a mi lado”.
