Porque si hay ganas no hace falta salir de casa para afrontar grandes retos. Basta con quererlo. Darle forma y lanzarse a por el objetivo. Y vivirlo.
Sin salir de casa, en su ciudad y con pocos medios. Así se planteó Pepe Brufal el pasado 5 de agosto la 1ª edición 24 h Elche: 24 horas ininterrumpidas de pedaleo en un circuito urbano, cercano a Elche, en una vuelta de 20 km que le permitía mayor comodidad en los avituallamientos, a diferencia de otros retos personales que le han llevado a realizar grandes recorridos, entre otros, ir en bici de Elche a Sabiñánigo, realizar la Quebrantahuesos y regresar también en bici.
El reto
Pepe Brufal, terapeuta Par Magnético, con larga experiencia en retos personales en bicicleta, inició esta última aventura a la 13 h del pasado viernes 5 de agosto, acompañado de José Antonio Esteve, vecino de Monforte del Cid. Y a partir de entonces, 24 horas de pedaleo ininterrumpido.
El agua de mar y viento
Brutal tenía todo preparado al detalle: recorrido, horarios, distancias y sus particulares avituallamientos: “la alimentación para este tipo de retos la hago liquida, y como siempre con agua de mar si es posible“.
Como ya nos explicó en otra ocasión “el agua de mar diluida es un pilar fundamental en mi alimentación. Pero es agua de mar isotònica. Creo que por eso recupero tan bien los esfuerzos”. Faltó por controlar un elemento que ya no está a nuestro alcance y es el principal enemigo de los ciclistas: “Había un intenso viento de Levante con rachas de hasta 60 km/h y una parte de la vuelta da completamente de cara, la ventaja es que la otra mitad da a favor” cuenta Brufal. “En una de las vueltas alcancé una velocidad máxima de 57 km/h”.
La noche
Hasta entrada la noche en que ya amainó. Y con la calma y la presencia de algunos compañeros se hizo más llevadero ese tramo. “Hubo varios compañeros de Elche que se acercaban a rodar algunas vueltas acompañándome, siempre es un gran aliento tener compañeros así”.
El cansancio acumulado de las horas de pedaleo continuo empezaban a pesar en las piernas. “Esas dos horas en que te viene el cansancio acumulado y el sueño acumulado es la parte más dura de todo el reto”. Tocaba parar y hacer un avituallamiento más largo. Y sacar fuerzas de flaqueza. “Sobre todo cuando llega el amanecer, ves que falta menos para terminar el reto y sacas fuerza de donde sea”.
El final
Las últimas horas, hasta llegar a la 13 h del sábado 6 de agosto pasan más rápidas “con la grata alegría de que vinieron más compañeros a hacer algunas vueltas”. Y embutan compañía concluye el reto. Después de 24 horas ininterrumpidas haciendo 644 km en un circuito urbano de Elche, a una velocidad media de 30,8 km/h. “A pesar de la dureza de las primeras 10 horas por el viento, está muy bien”.
Y ahora, al velódromo
El próximo reto, más ambicioso. “Me estoy planteando otras 24 horas, pero en un velódromo”. Sin más ánimo que hacer kilómetros y rodar. Y ver hasta donde da el cuerpo. “Creo que podría llegar a los 700 km en 24 horas”. Una cifra de récord. Sin salir de casa.
Fuente: senselimitsaventura.com