#Trend El respiro
La primera semana de junio, otrora cargada de tensión competitiva, también en España, ha significado un paréntesis. Digeridos el Giro de Italia y su resultado, la temporada entra en ciclo caliente porque la Dauphiné que tuvo a Kennaugh como telonero de Wiggins abre la cuenta atrás hacia el Tour. En Luxemburgo supimos de un ciclista, antes estrella en ciernes, Linus Gerdeman que ganó una etapa y la general de una carrera ya clásica en este momentos. Siguió por eso la racha verde, en esta ocasión con Carlos Barbero en la Philadelphia Cycling Classic en lo que es un punto y seguido que el Caja Rural ha tomado como norma, demostrando que la clase media del ciclismo español lejos de los pocos titulares que se dedican a los grandes éxitos está en disposición de recibir una apuesta que realmente merece.
#Click Un espectáculo de sesenta minutos
Una tarde de domingo cualquiera en Londres se monta un espectáculo redondo en torno a una de sus leyendas deportivas para abordar un reto mayúsculo, de esos que te dejan seco. Al margen del desafío deportivo, quedó patente el tremendo montaje tanto en el propio lugar como en la cobertura, planos, entrevistas, análisis y no pocas personalidades por la pelouse, entre otros Miguel Indurain. Sensacional, de lujo. se demuestra por enésima vez que el ciclismo gusta en sociedades avanzadas, pero claro, el ciclismo bien planificado, bien venido, generando demanda, lejos de la cutrez que caracteriza tantos lugares.
#Profile La hora se añade al bagaje de Wiggins
Ciertamente en este mal anillado cuaderno hemos hablado muchas veces de la singularidad que rodea el palmarés de Bradley Wiggins pero no por repetirnos creemos hacernos pesados. Con el récord de la hora sigue engordando la leyenda de esta celebridad que es Sir con mayúsculas asentado sobre una carrera deportiva que engloba tantas victorias, tan diferentes y tan peculiares. Disfrútenlo mientras puedan, la estación de Río de Janeiro espera allá en el horizonte.
Más sobre
-La casa rodante de Chris Froome
-La injustificada tortura de Kreuziger
-¿Vuelve José Belda?