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El alicantino Rafa Valls, corredor representado por Velofutur, ha competido desde la sexta etapa del Giro de Italia con una fractura en una de sus costillas, lo que sin duda alguna ha mermado su rendimiento pero no ha impedido al bravo ciclista de Vacansoleil-DCM finalizar la corsa rosa entre los 30 primeros dando un ejemplo de pundonor.
“En la sexta etapa y al paso por meta hubo una montonera. Yo me clavé el manillar en el pecho. Al día siguiente era un final en alto y estuve con los mejores, pero ya noté que me costaba respirar. Y el problema fue a más con el paso de las etapas. De piernas me sentía muy bien, en el mejor momento de mi vida, pero cada vez que intentaba coger aire, notaba un dolor muy intenso hasta que ahora hemos podido comprobar que he corrido esas dos semanas con una fractura de costilla”, explica Valls.
El alicantino tiene palabras de elogio hacia el equipo: “El doctor de Vacansoleil-DCM se preocupó siempre por mí y estuvo pendiente en todo momento. El problema es que en ese momento está todo inflamado y en las placas no se acababa de ver nada claro precisamente por la propia inflamación. En varios momentos pensamos en la retirada. Pero estaba peleando por un puesto entre los 15 primeros y no quería bajarme. Sin embargo, en los últimos días ya fue imposible aguantar con los mejores y perdí tiempo. El dolor era demasiado fuerte y tenía claro que algo no iba bien. Al llegar a casa y con toda la zona desinflamada es cuando se ha podido ver bien el problema”.
El ejemplo de Valls certifica que los corredores están hechos de otra pasta y son siempre un ejemplo de superación: “Alguna vez me ha tocado bajarme en carrera. Y lo he hecho siempre en circunstancias límite. En este Giro, además, el equipo me estaba apoyando desde el primer momento y era el hombre para la general. Me encontraba en un gran momento de forma y retirarme era decepcionar a todo el mundo, por lo que lo intenté hasta el final. Ahora hemos visto que efectivamente había una fractura pero estaba claro que algo no funcionaba bien porque el dolor era excesivo. Sin ese golpe, hubiera estado mucho más arriba y eso es lo que me da moral para lo que resta de temporada”.
