Aunque la mayor parte de los aficionados ciclistas tendrán la vista puesta mañana sábado en lo que sucede en tierras gallegas en el inicio de la Vuelta, y una pequeña parte estará pendiente de los Campeonatos de España juniors y masters en Murcia, hay un tercer escenario ciclista que no por minoritario deja de ser atractivo: el Red Hook Criterium de Barcelona, por primera vez en nuestro país.
Como escribía hace unos meses, se trata de unas series mundiales con vocación internacional pero sin perder su carácter amateur. Tras las dos habituales citas neoyorquinas, este sábado llega a Barcelona, para terminar en octubre con otra clásica, la prueba de Milán, que hace tres años se anotó el vasco Jon Ander Ortuondo, uno de los mejores especialistas nacionales. «Es cierto que me preparé a conciencia entonces, pero también la competencia era menor». Los protagonistas, dos centenares de ciclistas urbanos procedentes de países como Estados Unidos, México, Nueva Zelanda Rusia, Italia, Francia, Gran Bretaña, Chequia y naturalmente España, afrontarán un circuito de 1,25 kilómetros por vuelta en el Parc del Fórum barcelonés con sus bicicletas de piñón fijo, más similares a las de pista que a las «fixies» urbanas.
Ortuondo, que se define como «un ciclista aficionado que monta en BTT, aunque también he hecho bastante pista cuando estaba en Italia«, describe este ciclismo como «totalmente amateur, y que no quiere profesionalizarse para no caer en los defectos de otras disciplinas, aunque la gente tenga sus patrocinadores. Pero sobre todo se viaja para buscar la experiencia, la convivencia. Gente de Estados Unidos que viene una semana para conocer Barcelona, por ejemplo, y que aprovecha para competir».
La prueba constará de tres series clasificatorias, desde las cinco y media, «una especie de entrenamientos cronometrados como los de las motos o la Fórmula 1, que determinan los setenta corredores que afrontarán la final –a partir de las nueve-, en una carrera de 40 minutos», en concreto 24 vueltas para totalizar 30 kilómetros. Ortuondo considera que estas dos disciplinas motorizadas son más parecidas al Red Hook que cualquier otra modalidad ciclista. «Se trata de una competición en la que tienes que coger la posición, sobre todo en la parte final, por lo que es muy importante apurar las frenadas, coger la trazada, arriesgar…».
Los protagonistas de esta cita de Barcelona serán principalmente los norteamericanos como Neil Bezdek –líder de la general del Red Hook-, Kyle Murphy, Marc Marino o Evan Murphy, aunque Ortuondo señala también al italiano Francesco Martucci. En cuanto a sus opciones, «tengo ganas de hacerlo bien, pero de los españoles el que mejor puede ir es Enol Costales, un chaval que corre en aficionados y que seguro que llegará lejos». Y es que, aunque sea un ciclismo diferente, «buena parte de los pilotos punteros corren en equipos de carretera, incluso en alguno continental americano». Y los vínculos con la pista también son importantes «porque el entrenamiento en velódromo es fundamental. Incluso hemos tenido algún pistard destacado en alguna carrera, como el campeón americano de ómnium».
Ya lo sabéis: si queréis combatir el calor veraniego, con un espectáculo refrescante a base de un ciclismo distinto, el Red Hook Barcelona es vuestra cita este sábado.