En el peaje de Pamiers, entre Toulouse y Foix, dos motos y un coche de paisano con cuatro agentes de aduanas franceses registraron una de las camionetas del RadioShack. La policía obligó al auxiliar del equipo a salir del vehículo y a sacar las maletas para inspeccionar el contenido del bus y de las bolsas. Cuando una de las agentes vio al redactor gráfico de As fotografiar la escena, se acercó para pedirle que se identificara y parara, ya que se trataba de un examen confidencial del Servicio Aduanero. Por el momento, no ha trascendido que se haya encontrado ninguna sustancia dopante.