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Una imagen de Peña en el velódromo de Barcelona © Instagram
Ocho años después, de que Ignacio Prado fuese el representante en Rio, México volverá a tener un participante masculino en las pruebas de fondo de unos Juegos Olímpicos, en concreto en el ómnium. Se trata de Ricardo Peña, un sudcaliforniano de 22 años, y que también tiene vinculación con España, donde ha llevado parte de su preparación este invierno, concretamente en Barcelona, y bajo la dirección de Jaume Mas.
«Para mí primero estar en los Juegos era un sueño, y luego se convirtió en una meta. Y ahora es un objetivo, que es hacer el mejor resultado posible, y que no sería otro que hacer un top diez. No descarto un mejor puesto, pero vamos a pelear con gente que lleva muchos años, como Viviani, como Thomas, como Hayter. Y hay que ser realistas y ver que estar entre los diez mejores sería un gran resultado para mí».
Y también tiene palabras para Sebastián Mora. «No he platicado mucho con él, pero es un gran corredor, y una muy buena rueda a seguir. Además, tiene muy buena relación con mi director en México, Luis Fernando Macías, y con Jaume».
«De insistirles, al final mis papás me dejaron competir»
Pero antes de que llegue ese momento, ese 8 de agosto en que competirá en Saint Quentin-en-Yvelines, queremos conocer un poco mejor a este sudcaliforniano de La Paz, precisamente la misma localidad de la también olímpica Yuli Verdugo, donde nació el 30 de junio de 2001, y con la que guarda algunas similitudes en su periplo ciclista.
«Fue por un vecino, que hacía ciclismo de montaña. Y mi hermano mayor empezó con este tema. Yo iba a verle, pero entrenaba futbol, y mis papás no me dejaban competir, pero de insistirles, al final me dejaron, primero entrenar, luego competir y de los seis años hasta ahorita». Y de ahí a la pista el cambio no es muy difícil en México. «Dejé un poco la montaña de lado, pasé a hacer carretera y alternarlo con la pista. Y aunque al principio me daba un poco de miedo, pronto me empezó a gustar mucho». Y poco a poco, quemando etapas y con el aval de los buenos resultados pronto llegó a la selección.
«Corrió con la selección en mi primer año de juvenil, lo que aquí llamamos juvenil C, y fui a los Panamericanos y conseguí muy buenos resultados, campeón en persecución por equipos, en madison. El siguiente año igual, pero el mejor resultado lo logré ese año, 2019, en el Mundial de Alemania, donde terminé cuarto en la puntuación. Luego con la selección absoluta también he tenido buenos resultados, especialmente en los Panamericanos», aunque también hay que destacar la medalla de plata de la Copa de las Naciones de Cali, en 2022, en madison junto a Jorge Peyrot, con el que también había sido cuarto en Milton.
De apostar por la madison a luchar por el omnium
Con este panorama, estaba claro que, en el presente ciclo olímpico, intentar clasificar para París 2024 sería un objetivo. «Deportivamente, íbamos a apostar por la madison, con mi compañero Jorge, pero al final no pudimos dedicarnos, y tuve que hacerlo yo sólo por el ómnium. Lo veía difícil, pero después del Mundial hicimos cuentas. Pero fue después del Europeo cuando lo vi más claro, ya que estábamos dentro y que haciendo un Panamericano como otros años había hecho, podía clasificar». Allí Peña, con la tercera plaza, daba el paso decisivo de cara a París.
Sin embargo, la situación económica de su Federación lo complicaba bastante. «Ha sido algo duro, con tres años de trabajo y con los problemas económicos que tenemos. Al final se movieron las cosas y CONADE ha estado muy pendiente y hemos podido conseguir los recursos para ir a todos los sitios donde hacía falta estar, y por ello se ha podido conseguir la clasificación. También es cierto que he tenido que gastar mucho dinero de mi bolsillo para el material, pero es un gasto menor comparado con los viajes. Pero al final he contado con el apoyo necesario y no quiero olvidarme tampoco de mi equipo de ruta, el Crisa SEEI, y de mi familia».
Sin embargo, no fue hasta que el Comité Olímpico Mexicano se lo comunicó cuando «tuve la tranquilidad total, cuando ya tienes la planificación, y ya cuentas con ese aliciente para ponerte a trabajar para los Juegos».
«Jaume Mas me ha aportado mucho»
Una preparación que comenzará «con una concentración de tres semanas en altura, en el Centro Nacional de Alto Rendimiento de la Ciudad de México, y después iré a Barcelona, con Jaume, para hacer en junio y julio algunas competiciones de pista y de carretera, y llegar en óptimas condiciones para los Juegos Olímpicos. Faltan algunos pequeños detalles por afinar, pero está todo bastante afinado». Y no se olvida de el técnico catalán «porque me ha aportado mucho, es una persona que sabe exagerado, y sobre todo que sabe aplicarlo con cada uno, buscando ese objetivo de la eficiencia. Primero trabajé a distancia, pero este año he estado con él, este invierno he aprendido muchísimo, no sólo a entrenar, sino a moverme en competición. Y espero que en este mes que esté en España, mejorar más lo que ya he mejorado estos meses».
Y a sus 22 años, lo tiene muy claro. «Primero quiero hacer el Mundial, porque es importante para el estado y para mí, porque hay becas. Luego en 2025, que es un año menos importante para la pista, hacer más carretera, si puedo en Europa, pero si no, estar compitiendo en Estados Unidos y México, aunque sin olvidar las Copas de las Naciones o el Mundial. Si me gustaría correr en Europa, sobre todo en España, porque hay un buen nivel, pero me gustaría llegar con un buen resultado de los Juegos, para que te reconozcan».
Y de cara a un futuro olímpico, «los Juegos de Los Ángeles están a una hora y media en avión, y son un aliciente. Me gustaría intentar esa clasificación de la madison con Jorge, porque tuvimos muy buenos resultados en 2022, y llevábamos un buen progreso. Somos del mismo lugar, llevamos corriendo juntos desde chicos y nos entendemos muy bien, aunque viene muy buena gente en México para la madison. Va a estar buena la pelea, y seamos nosotros o no, creo que México estará en los Juegos Olímpicos de los Ángeles en la madison, aunque lo ideal sería poder meter un equipo de persecución».
