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Urán ya se recupera en su casa de Mónaco / © Gruber Images
Ha pasado un mes y un día desde su caída en la Vuelta a España y Rigoberto Urán disfruta, desde el pasado 19 de septiembre, de su recuperada libertad tras ser dado de alta del hospital en el que estuvo tres semanas ingresado. Ya en casa, es momento de hacer balance y lo primero que asegura el colombiano en declaraciones publicadas por la web de su equipo, EF-Education First, es que “han sido unas semanas muy duras. De las más complicadas con tanto dolor y tanto tiempo en el hospital. Pero no sólo ha sido eso. También ha sido difícil para mi familia al tener que verme en ese estado”.
Rigo recuerda el momento de su caída y explica, en relación a la reacción de sus compañeros y demás personal del equipo, que “me vieron con mucho dolor. Especialmente Dani Martínez. Cuando ves a un compañero de equipo sufriendo tanto, es complicado seguir adelante. Especialmente, cuando es la primera vez que ocurre. Te trastoca mucho ver a alguien en el suelo con tanto dolor. Es complicado. Una situación dura para todo el mundo”.
Tras ser dado de alta del hospital, Urán se muestra, como es habitual en él, muy positivo. “Todo está bien. Poco a poco voy mejorando. Ahora estoy en Mónaco, pero tendré que volver a Barcelona sobre el 10 de octubre para pasar una revisión con el cirujano, el Dr. Mir” y devela que en esa visita “veremos cómo está curando todo y si necesito otra operación”.
Por eso, el corredor del EF-Education First no quiere ponerse plazos para su vuelta a las carreras. “Tras mi visita al Dr. Mir sabré más sobre cuándo podré volver a correr. Por el momento, no puedo coger un avión para hacer un viaje largo. Lo hace todo un poco más complicado”, asegura.
Además, el corredor colombiano se muestra emocionado por la simpatía y muestras de cariño recibidas. “He recibido muchísimo apoyo por parte de todo el mundo. De amigos, familia, seguidores. Realmente, me demostró lo mucho que la gente se preocupa. Fue muy bonito. Gente buscando tiempo para mandarme mensaje. Fue una corriente de buena energía. Es algo que me ayuda mucho. Te da motivación en estos momentos en los que tratas de recuperarte”.
Por su parte, el médico del conjunto americano, Rick Morgan, explica que “durante la cirugía, le quitaron una placa metálica anterior de la clavícula y la cambiaron por una nueva. Además, también tiene otra placa de metal en la escápula para estabilizar el hombro y ayudarlo a recuperar. Las cicatrices tienen buena pinta y están curando bien. En cualquier caso, llevará tiempo. Tenemos que tener en cuenta que la operación duró seis horas. Fue una intervención importante”.
Morgan añade que en estos momentos “tiene el dolor bajo control y ya está haciendo fisioterapia. Está haciendo lo que llamamos fisioterapia activa y pasiva con un especialista en su propia casa. El objetivo principal es devolver la movilidad completa al hombro y luego mejorar la fuerza. No hay ninguna prisa por acelerar su vuelta a la bicicleta. Especialmente, en esta parte del año”. En cualquier caso, el galeno asegura que “no hay ninguna preocupación en cuanto a que pueda hacer una recuperación completa”.
