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Rubén Fernández en el pasado Giro Emilia © Bettini
Rubén Fernández (1991, Movistar) ha terminado la temporada con un sabor dulce, después de dos años complicados por las lesiones, las caídas y las enfermedades. El ciclista murciano se ha reencontrado después de superar una lesión en el pie que le amargó 2017 y el inicio de 2018. Ha vuelto a recuperar el camino que dejó en 2016 –líder en la Vuelta a España– y ‘top diez’ en pruebas como Tour Down Under, Polonia, Burgos, Algarve o Gran Bretaña, además de ganar el TOP Ciclo 21 sub-26 2016. Su último dorsal se lo puso en el Tour de Guangxi y seguido se concentró con su equipo en Pamplona. Su último compromiso es el Criterium de Saitama, sin embargo, que se disputa en Japón este fin de semana y donde acompañará a Alejandro Valverde.
-De China a Pamplona y ahora a Japón.
-Ya terminamos en Japón, aunque se puede decir que estoy de vacaciones desde hace unos días, sin tocar la bici. Ahora hacemos Saitama y casi arrancaremos la temporada. No se para.
-Terminó séptimo el Tour de Guangxi, ¿qué balance hace de su temporada?
- Motiva volverme a ver a ese nivel. No es nada fácil hacer un topten en una vuelta WorldTour. Además, he terminado una temporada completa que era el objetivo porque llevaba dos años que no lo conseguía. He acabado con buen sabor boca y buenas sensaciones. Todos los problemas que tenía en el pie se han solucionado y he podido volver a retomar mi sitio; con molestias no podía rendir nada.
-Ciertamente, estuvo dos meses sin competir tras el Tour Down Under.
-Después de Australia, me volvió a aparecer el dolor de pie. Me sometí a más pruebas y los médicos confirmaron una fractura por estrés, algo muy raro pero que ahí estaba. Tuve que guardar reposo absoluto, sin apoyar el pie, sin poder hacer absolutamente nada. Fue volver a empezar, como una nueva pretemporada. Parece que está todo solucionado, hasta el momento va todo perfecto.
-¿Ha recuperado la senda cuando alcanzó el liderato en la Vuelta 2016?
- Vamos a ver si podemos volver a estar a nuestro nivel. Yo pienso que sí, haciendo las cosas y llevando la progresión que he retomado. En teoría mi nivel es estar ahí, disputando, con la motivación de que podemos estar ahí y que podemos conseguirlo.
-¿Ha pasado por momentos difíciles estos dos últimos años?
- Han sido una lucha constante, no solo físicamente, también psicológicamente. El equipo me ha arropado, sobre todo Eusebio (Unzué), apoyándome y dándome tranquilidad en todo momento. Estoy muy agradecido a todos por la confianza.
-El Movistar mantiene a Valverde, Quintana y Landa de líderes y también han irrumpido Soler y Carapaz.
- De Alejandro qué vamos a decir, el Mundial era un título que le faltaba, el único se puede decir, así que chapeau por él; se lo merecía por toda su trayectoria. El nivel del equipo es muy alto. Richard y Marc, además, han dado un paso muy grande.
-Ese es el paso que le hubiera gustado dar particularmente.
- Sí, exactamente, pero las circunstancias son las que son y hay que tener tranquilidad. Vamos a ver si podemos volver a nuestro nivel y a nuestro sitio. Si no tienes esa ambición, mal vamos. Y luego está el trabajo de equipo, dejarse hasta el último gramo de fuera por tu líder y estar a la altura de lo que exige el equipo.
-¿Qué gran vuelta le gustaría disputar el próximo año?
- Cada uno tiene sus preferencias, pero el equipo decide, no tenemos nada asegurado. Sí me gustaría hacer la Vuelta por el recorrido y resarcirme del año pasado, cuando tuve que abandonar, y para poder estar a la altura del equipo.
