Primer día de descanso y día también para el balance de Rubén Plaza, el análisis roza el sobresaliente, puesto que ayer mismo fue una de las piezas clave en el engranaje de Movistar.
“Eusebio me pidió que me centrara en la función de ser gregario y que dejase a un lado las posibilidades de firmar un buen puesto en la general. Y en eso es en lo que estoy centrado”, comenta.
El corredor de Ibi estuvo toda la semana ejerciendo junto a Jonathan Castroviejo de aguador de sus compañeros. También lo hizo en las etapas de media montaña de Córcega y siguió en esa línea hasta los Pirineos. Con la alta montaña, Rubén Plaza sabía que llegaba el momento de apoyar a sus líderes y en la jornada del domingo estuvo atento desde el primer metro hasta casi el último. Plaza fue de los más activos en los primeros 30 kilómetros y para la historia quedará su ataque con Alejandro Valverde a rueda en uno de los tramos llanos entre puerto y puerto. Sólo Froome pudo cogerles rueda en un momento en el que podía haber sido realmente decisivo.
Pero además Plaza tiró en la última subida del día con un ritmo sostenido que acabó siendo realmente duro.
Ahora llegan días de descanso para él, con jornadas de transición a la espera de la etapa del Mont Ventoux y las jornadas en los Alpes, aunque quizás pensando en la general por equipos tenga que disputar la cronometrada del miércoles, donde Saxo Bank, su gran rival ahora mismo, cuenta con buenos especialistas.
Fuente: Velofutur