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Sandra Pastor, en el podio como campeona del mundo © @foticus.com y @fotoescurra.com
Redacción / Ciclo 21
Lleva poco tiempo compitiendo en esto del ciclismo, pero desde luego motor tiene para ello. Sandra Pastor es madrileña de Villaviciosa de Odón, y dentro del mountain bike ya se ha hecho un nombre en apenas siete años. Tanto, que hace solo unas semanas, en concreto el pasado 23 de abril, se proclamó nada menos que campeona del mundo de rally (XCO) en su categoría de máster 45 en Cerro Bayo, Argentina.
Pero la biker del Invicta Salud Deportiva, centro propio ubicado en Boadilla del Monte y que patrocina a su equipo, no se ha vestido de arco iris así por así. Su currículum deportivo atesora éxitos que van desde los Campeonatos de Madrid de maratón (2017-2019-2022), pasando por las Copas de España de maratón (2019) y de Madrid de maratón (2022), hasta llegar al Campeonato de España de XCO (2020) y el subcampeonato nacional de enduro (2020). Casi nada… Por este motivo, la Federación Madrileña de Ciclismo le ha hecho una entrevista. No todos los días se proclama uno campeón del mundo en algo.
– Es un resultado histórico para usted y para nuestro XCO. ¿Cómo fue la carrera? ¿El circuito a priori le venía bien?
– La carrera fue una sorpresa, porque el circuito iba cambiando conforme pasaban los días. Llegué un día con sol, terreno rápido y muy juguetón. Empezó a llover poco y el terreno con más grip pues se disfrutaba más aún… Pero seguía lloviendo día y noche 3 días más… os podéis imaginar el circuito. Las raíces afloraron, el terreno no agarraba nada, charcos por todo lado… Otro circuito. Así que hasta las 9 de la mañana del día 23 de abril no supe qué me iba a encontrar. Eso sí, me llevé cubiertas de barro y eso fue mi salvación, además de que el barro se me suele dar bien, por eso mis nervios no empeoraban cuando se acercaban los días. Al revés, me sentía más segura. La rival que tenía estudiada era una italiana, 2 veces campeona del mundo y otras tantas de Europa, e históricamente sacaba mucho tiempo a sus rivales. Me preparé para ello y no iba a ser nada fácil, pero sabía que el barro podría ser un hándicap para ella… no. Pero errores iban a cometerse con más facilidad. Todo se unió y ni yo era mucho más débil que ella, y cometió el error en el momento clave para yo salir como un cohete a 500 metros hasta la meta.
– ¿Qué sensaciones tuvo cruzando meta y luego en la ceremonia de pódium? ¿Se puede decir que es su mayor satisfacción como deportista hasta ahora?
– Cruzando la meta fue la relajación más grande que se pueda sentir. ¡Lo he logrado y soy campeona del mundo! Sueltas todo el esfuerzo, trabajo, dudas, inseguridades y por fin se hace realidad el sueño. ¿El pódium? En este caso bajo una lluvia intensa y mucho frío y yo de corto (risas) pues no había frío ni agua, solo escuchaba mi nombre y olvidé que en estos casos se ponía el himno de tu país. ¡No estaba preparada! Fue muy emocionante, sentía a todos los que quisieron estar ahí para verme, te trasladas de una manera mágica y grabé cada segundo en mi retina para no olvidarlo jamás. Por supuesto que es mi mayor satisfacción, no creo que haya una mayor. Porque ha sido muy especial. Mi primer Mundial, sola y después de una grave lesión, hacía tan solo 10 meses.
– Debido a esa grave lesión que comenta, ¿Cómo panificó su preparación para llegar a Argentina en las mejores condiciones posibles?
– La preparación ha sido desde cero tras haber perdido toda la musculatura debió a una operación en el tobillo. Fue en la última prueba del Open de España, donde iba líder; apoyé el pie para librar una caída y me rompí el calcáneo. El traumatólogo me daba 3 meses de reposo absoluto. Esto hubiera sido tirar la siguiente temporada, así que me puse manos a la obra para acelerar la recuperación lo antes posible.
Tengo la suerte de ser fisioterapeuta, tengo una clínica especializada en la salud deportiva y llevo 25 años de fisioterapeuta. Esto me permitía poder «abusar» de los medios para acelerar la recuperación. Para mí este accidente no solo fue un reto personal sino profesional. Puse al límite todos los tiempos de recuperación, hice todo lo que estaba en mi conocimiento y no en los protocolos. Claro, le dedicaba muchas horas al día, en piscina, en gimnasio, tratamiento diario en la clínica. Al mes me subí en la bici, aún sin caminar bien. Lo más complicado fue igualar la musculatura, y todavía no está al 100%, ya que se nos echó el tiempo encima. Héctor, mi entrenador, me dijo que tenía que ponerme a entrenar duro sobre la bici para llegar en forma. Este objetivo fue una motivación para ambos porque no era nada fácil lograrlo.
Fueron 4 meses de compaginar el dolor del tobillo con los entrenamientos específicos. Me dejé guiar por Héctor Guerra para llevarme hasta el día clave lo mejor posible. ¡Y salió muy bien! Le estoy muy agradecida, realmente.
– ¿Qué objetivos tiene a corto plazo? ¿Europeos, Nacionales u otras modalidades?
– Me hubiera gustado el Europeo de XCO, pero no va a celebrarse y no sé por qué. Así que haré las 2 últimas pruebas de la Copa, Mallorca y Baza, y el Campeonato de España en Candeleda. Campeonato de España de Enduro en La Adrada, y luego descanso para empezar con una modalidad totalmente nueva para mí como es el ciclocross. Y ya me he apuntado al Campeonato de Europa de Namur en Bélgica. Veremos a ver… Ya ves que modalidades he hecho casi todas, y solo me falta esta.
Enduro es con la que más disfruto siempre, pero para exigirme más físicamente y estar más competitiva me gusta el XCO. Con el XCM di mis primeros pasos, pero la técnica es lo que más me gusta de este deporte. Por eso estoy aquí.
Pues ya sabéis que este invierno tendremos también a Sandra Pastor en el barro. No hace falta decir que será una rival muy a tener en cuenta y que seguirá dando muchas alegrías a nuestro ciclismo en el futuro.
