Fernando Ferrari / La Nucía (Alicante) / Enviado especial Ciclo 21
Tadej Pogačar (Klanec, Komenda, Eslovenia 21 de septiembre de 1998, 24 años) sigue siendo un hombre tranquilo, afable, empático, como corresponde al número uno de la clasificación UCI y ganador, entre otras pruebas, de dos Tours de Francia, Lieja y dos Lombardia. Asume su papel de líder del UAE, de figura del ciclismo mundial actual y como tal atiende pausada y reflexivamente a los medios de comunicación presentes en el día reservado para ellos entre los que estaba Ciclo 21.
Fue de los últimos en llegar a la comida después de otro largo entrenamiento en los alrededores de La Nucia, al lado de Benidorm, en la provinci de Alicante. Kilómetros y más kilómetros de base supervisados por su entrenador Iñigo San Millán y coordinados por Joxean «Matxin» Fernández, en su nuevo rol de mánager deportivo. Apareció en la sala con chándal del equipo arábigo y chanclas negras, capucha tocada a modo de rapero o caballero jedi, para quitársela, medio despinado, sonriente y con cierta faz de somnolencia en plena hora de siesta española. No fue óbice para su conferencia de prensa sin estrés, como el que reconoce que nunca tiene.
-¿Cuál es su balance de 2022?
-Este año ha hecho un año fenomenal, pero el año que viene puede ser aún mejor. Va en la dirección correcta
-¿Cómo sigue analizando su Tour de Francia 2022 y su derrota ante Vingegaard?
-Vingegaard no era el único rival y que no había ningún Proyecto ‘Batir a Vingegaard’ gestándose actualmente entre la plantilla del UAE. No, también hay otros corredores que vienen ahora, incluso corredores más jóvenes, quizá incluso más fuertes, nunca se sabe quién va a ser el próximo en ganarte.
-¿Tuvo equipo suficiente para batirse de tú a tú con el Jumbo?
-También tenemos corredortes fuertes. Pero Vegard Laengen y George Bennett tuvieron Covid, Marc Soler enfermó, Rafal Majka tuvo un problema muscular, Marc Hirschi tuvo problemas con su rodilla desde el primer día. Así que no, no presioné para reforzar el equipo del Tour. Puedes conseguir otro corredor más fuerte, pero si tiene Covid, igual no importa. Incluso con ocho corredores en forma, habría sido difícil vencer a Jumbo. Esta vez lo han hecho todo bien.
-¿Y su plan para alcanzar el triplete en París?
-El programa será similar al de la temporada pasada, pero quizá no llegue a las primeras carreras en plena forma. Es posible que me salte una concentración de altitud de pretemporada y en lugar de estar en plena forma en enero y febrero, podría estar más seguro de estar en mejor forma para los objetivos mayores.
-¿La Vuelta a Flandes será entonces su primera gran objetivo del año después de estar en la A Través de Flandes?
-Sí. La carrera más caótica del año, la más estresante también, pero con el mejor ambiente. Me gusta. No sé si es realista en mi segunda participación, pero este año he estado cerca. Quizá tenga que seguir intentando ganar Flandes hasta el final de mi carrera. Pero aunque no ganes, ya es una gran sensación poder competir con los mejores corredores. Pero cada año es diferente, quiero ir lo mejor preparado posible e intentarlo. Pero no se trata tanto de ganar, es sólo que cuando puedes correr y estar aquí arriba, es una sensación muy agradable.
-Pero antes estará la Milán-Sarnremo, otro monumento al que podría aspirar tras los de Lieja y Lombardía
-Está aún un poco en el aire. Creo que Sanremo y Flandes son dos de las carreras más difíciles de ganar para mí, aunque no estuve tan lejos en ambas. Sanremo es una carrera larga y aburrida hasta la costa y entonces tienes un solo momento en el que necesitas sacar la máxima potencia. Es una de las más difíciles de ganar, por eso es tan bonita.
-¿Le gustan más las carreras de un día que las grandes vueltas?
-No lo sé. Es diferente. Una gran vuelta dura tres semanas. Una carrera de un día sólo dura un día
-¿Hará el Giro de Italia algún año? ¿Volverá a la Vuelta?
-Me gustaría hacer el Giro este año, pero el Tour es la prioridad para mí y para el equipo. Así que seguimos con el plan. El Giro es la carrera que pasa más cerca de Eslovenia. Si sólo dependiera de mí, ya habría hecho el Giro en los dos últimos años. Pero tampoco soy el más listo a la hora de elaborar un programa. Ya veremos cuándo voy. Quizá después del Tour podamos empezar a ver qué puedo hacer todavía en los próximos años, seguro que estará el Giro y otra vez la Vuelta a España, quizá otra gran vuelta dentro de un año. Nunca se sabe. Para mí, el recorrido no es tan importante. Iría igualmente si tuviera tres contrarrelojes o una. Siempre está bien hacer una carrera diferente, la maglia rosa es muy bonita e Italia tiene algunas de las mejores carreras.
-¿Es factible el doblete en el mismo año?
-Puedes correr los dos, pero eso es realmente exigente para tu cuerpo, incluso si puedes ganar los dos. Creo que es posible ganar los dos, pero hay que pagar un precio. Después puede que estés tan agotado que tu carrera haya terminado.
-¿Qué le parece el fenómeno de su compañero Juan Ayuso?
-«Si estoy cagado en el Tour, puede sentirse libre de correr en mi lugar. Juan es una de las mejores máquinas en carrera. Va a hacer grandes cosas de todos modos.
-¿Y la decisión de Evenepoel de hacer el Giro en lugar del Tour?
-Sabia. Viene de una temporada fenomenal y quizá el año que viene pueda hacerlo aún mejor. Sí, puede ganar el Tour ahora mismo. Si puedes ganar la Vuelta y ser campeón del mundo el mismo año, también vales para el Tour.
-¿Hasta cuándo piensa prolongar su carrera deportiva?
-Veremos si sigo en la cima cuando tenga treinta y tres o treinta y cuatro años. Quizá ese sea el momento en que diga: ahora es el momento de hacer otra cosa. Entonces podría descubrir algo aún mejor que el ciclismo.