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El Belkin al frente en una prueba
El manual de instrucciones no escrito del mundillo ciclista dice que el pistoletazo de salida del Tour de Francia es, a la vez, el inicio ‘oficial’ de los rumores y movimientos en el mercado de fichajes. Con la primera parte de la temporada ya acabada, son muchos los corredores que ya pueden calificar su temporada como un éxito o como un fracaso, si bien es cierto que para estos últimos todavía queda la oportunidad del otoño. A la vez, los teléfonos de los managers y directores de los equipos comienzan a sonar de manera imparable. Algunos, con suerte, para cerrar nuevos contratos con los corredores que el próximo año defenderán sus intereses. Otros, más preocupados, en la búsqueda de patrocinadores que den viabilidad a su proyecto.
En este sentido, las últimas 24 horas han servido para que se forme una tormenta perfecta sobre el ciclismo holandés que, a día de hoy, no tiene claro si el próximo año tendrá tres equipos, dos, uno o, simplemente, ninguno sobre la carretera. Durante la jornada de ayer Michael Boogerd, Erik Breukink, Jean-Paul van Poppel y Michael Zijlaard, es decir, los hombres detrás del proyecto Orange Cycling Team, que sigue intentando poner un nuevo equipo holandés en la carretera de cara a 2015, parecía que tenían buenas noticias.
La empresa Roompot Vakanties ha manifestado su “serio interés por convertirnos en patrocinadores del ciclismo”, tal y como ha asegurado Esther Biondina, directora de marketing de la empresa, que añadió que “ya hemos mantenido varias conversaciones con Erik Breukink y Michael Zijlaard y si todo sale bien nos gustaría estar patrocinando un equipo, como pronto, a principios de 2015”, por lo que su salida a las carreteras el próximo año sería más un deseo que una realidad cerrada.
Belkin dejará el ciclismo a final de temporada
Richard Plugge
Pero la alegría de los aficionados holandeses ha durado muy poco. Esta mañana un fortísimo terremoto ha sacudido el ciclismo de aquel país cuando Belkin anunciaba que dejaría de patrocinar al equipo con el mismo nombre a finales de la presente temporada. Lo anunciaba prácticamente un año después de unir la imagen de su marca con motivo del Tour de Francia 2013 a las camisetas del Blanco, el equipo nacido tras el abandono, por motivos muy distintos a los de ahora, de Raboobank.
Desde la empresa americana han asegurado que “hemos cambiado nuestra estrategia comercial. Desembarcamos en el ciclismo para mejorar el conocimiento de nuestra marca. Esto ha funcionado muy bien en Europa, pero ahora queremos centrarnos en una estrategia más globalizada. Por eso hemos decidido no seguir patrocinando al equipo en 2015”.
Richard Plugge, manager general del equipo, no ha escondido su “decepción por esta decisión. Tras el gran Tour de Bauke Mollema y Laurens ten Dam el pasado año, las buenas actuaciones que hemos tenido, nuestra manera de plantear batalla en todos los frentes, la transparencia y la cercanía con los aficionados que hemos mostrado, estábamos convencidos de que todo iba bien”.
Pese a que Plugge se muestra optimista ya que “todas esas circunstancias no han pasado desapercibidas para el público y los empresarios”, lo cierto es que el tiempo corre en contra de los responsables de un proyecto en el que la mayoría de los corredores terminan contrato este año y al que, como ya hemos comentado, le ha salido una importante competencia en su propio país en ese Orange Cycling Team que seguro que estará encantado de encontrar ganancias en el río revuelto que deja el Belkin.
“Somos un equipo holandés, con una proyección internacional y miembros del World Tour. En las próximas semanas vamos a centrarnos en encontrar un patrocinador principal para el próximo año” ha añadido con optimismo Plugge, sabedor de que su pertenencia a la elite del ciclismo mundial puede desequilibrar la balanza a su favor en un hipotético duelo con el proyecto de Breukink y compañía.
Todo son dudas en Holanda
Con este nuevo escenario, lo que ayer parecía un panorama idílico con dos equipos holandeses en el pelotón internacional el próximo año, hoy se ha convertido en toda una incógnita. Con un Giant-Shimano que no tiene ni mucho menos asegurada su continuidad, la temporada 2015 abre ahora un amplísimo abanico de posibilidades. El escenario que nadie quiere imaginarse allí es el de la desaparición de todas las escuadras. Otra de las posibilidades, la que más gusta pero, seguramente, la menos realista, es la de la presencia de los tres equipos en el pelotón.
Lo que se antoja más probable, sobre todo atendiendo a la situación económica actual y al hecho de que Belkin deja libre una plaza World Tour (idéntica situación que se crearía si Giant-Shimano pone punto y final), es la fusión de intereses. El Orange Cycling Team es un proyecto sin corredores, pero con sponsor. El Belkin, desde hoy, es un equipo con ciclistas, pero sin patrocinador. ¿Se pondrán de acuerdo? Lo veremos en poco tiempo.
