Tinkov amenaza (de nuevo) con boicotear el Tour

Oleg Tinkov © Tinkoff

Oleg Tinkov © Tinkoff

Nicolás Van Looy / Ciclo21

Hay cosas que, lo queramos o no, se repiten año tras año. Las olas de calor veraniegas. Los atascos de tráfico del puente de agosto. El colapso aeroportuario causado por las huelgas de estos o de aquellos. Los dos (o más) partidos del siglo. Las uvas de la Puerta del Sol. El ciclismo, por supuesto, también tiene su dosis. Trasnochar para ver el Down Under cuando estamos sedientos de pedales. Las tardes de frío salivando por los adoquines. Una especie de excitación general cuando llega el turno del Giro. La morriña de saber que todo se va acabando cuando llega el Mundial. Y, parece, que ya tenemos una nueva costumbre: las amenazas de Oleg Tinkov. El excéntrico –por decir algo– patrón del Tinkoff que, de nuevo, amenaza con un boicot al Tour de Francia.

Lo hace el ruso, como ya lo hiciera en 2014, a falta de unos días para el inicio de la carrera y, por supuesto, haciendo referencia a la edición del año que viene. Es decir, exactamente igual que el pasado año. Hace ahora doce meses ya esgrimió los mismos argumentos –que, por otro lado, no son mal motivo de debate– amenazando con no tomar la salida en Utrecht. El problema para el magnate es que durante once meses parece haberse olvidado del asunto y, claro, la credibilidad se resiente cuando uno protagoniza según qué boutades.

Una vez más, y quizá el motivo de fondo pueda ser discutido con mayor seriedad de la que se pierde por las formas de Oleg Tinkov, el ruso plantea que los grandes equipos no deberían de tomar la salida en el Tour –y, por añadidura, en otras grandes carreras– si no reciben un fijo por su participación. “Todo el mundo sabe que los equipos ciclistas dependen por completo de los ingresos provenientes del patrocinio y ese es un modelo de negocio insostenible”, asegura el patrón –y a la vez patrocinador– del equipo de Contador y Sagan. “¿Qué va a hacer el Tour si no nos presentamos en la salida? Estoy preparado para boicotear el Tour de 2016 para hacerles ver y comprender que las cosas tienen que cambiar”, concluye.

También como siempre, Tinkov tiene un punto de vista muy particular sobre los emolumentos que sus trabajadores reciben. “Las grandes estrellas de nuestro deporte piden cada vez salarios más altos. Varios equipos tienen grandes dificultades para pagar, trimestre tras trimestre, las facturas. Algunos incluso están contratando corredores con la esperanza de que eso les abra las puertas de algún patrocinador”.

Así, su propuesta o reivindicación es que ASO, como organizadora del Tour de Francia, debería de pagar un fijo a los equipos por el mero hecho de tomar la salida. Esta idea, que resulta una práctica muy extendida en otros deportes, sería una gran novedad en el mundo del ciclismo. Al menos, del ciclismo en ruta. No debemos de olvidar, por ejemplo, que las grandes estrellas de ciclocross ya cobran unos fijos que varían dependiendo del tipo de prueba en el que tomen la salida.

Como decimos, la propuesta no es nueva ya que el propio Tinkov aseguró el pasado año que “el modelo de negocio ideal es el del reparto al 50%. La mitad del dinero tendría que venir de los patrocinadores y la otra mitad de ingresos como los de los derechos televisivos. Los equipos necesitan ingresos y, por el momento, no existen. Los derechos televisivos suponen el ingreso más importante en este deporte”.

En esa misma entrevista de 2014 concedida a Cyclingnews, el ruso explicaba que “RCS, ASO y otras entidades como Flanders Classics tienen que pagar a los equipos. Cuanto antes se den cuenta de esto, mejor será para el ciclismo”.

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