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Yates, ganador en la última etapa del Dauphiné / © Mitchelton-Scott
Si, por motivos más que obvios, resulta prácticamente imposible disociar la imagen de los Yates, la gran actuación protagonizada por Simon en el pasado Giro de Italia parece que no hace más que poner todavía más presión sobre los hombros de un Adam Yates (Bury, Reino Unido, 7 de agosto de 1992) que viaja a Francia como único y claro jefe de filas de un Mitchleton-Scott que parece haberse especializado en los últimos años en aportar la sal y la pimienta a unas grandes vueltas en las que, al final, son incapaces de rematar.
Los gemelos británicos parecen ser the next big thing de un ciclismo que sigue, desde la época de Sir Bradley Wiggins, montado en la cresta de una ola que parece no terminar y que parece que comienza a adivinar, todavía lejos, un Tom Pidcock que bien podría ser el relevo de los Yates.
Adam Yates, cuarto hace dos años en la Grande Boucle –y mejor joven de aquella edición por delante de Meintjes, Buchmann o Barguil–, optó en 2017 por la prudencia y no exponerse a la siempre imperiosa e imperativa necesidad de mejorar en la gran cita del año lo hecho doce meses antes. En otras palabras, no quiso el británico –o los responsables de su equipo– acudir a una carrera en la que todo aquello que no fuese conseguir un podio sería visto, en el mejor de los casos, como un estancamiento en su progresión.
Optó entonces por un calendario que le llevó a debutar en el Giro de Italia, donde con un noveno puesto final confirmó las buenas sensaciones dadas en Francia, y a regresar a la Vuelta a España tres años después de que la ronda nacional fuese su primera grande. Allí estuvo a la sombra de Esteban Chaves, que pronto acabó por ganarse los galones de único jefe de filas del conjunto australiano… pero su 34º puesto final, por detrás de su compañero Jack Haig (21º) supo a excesivamente poco.
Ahora vuelve al escenario más grande e importante del mundo con, como ya hemos dicho, el extra de presión que para él supondrá sentirse siempre comparado con el Giro de su hermano. Su 2018 no ha sido, en absoluto, malo, pero carece de la brillantez que, como a la mujer del César, se le supone a un máximo favorito al triunfo en el Tour de Francia.
La Tirreno-Adriático, Tour de California y el Dauphiné son sus apariciones en la más alta categoría en esta campaña y lo cierto es que hasta el último minuto, parecía que el triunfo en la quinta etapa de la cita italiana no iba a conseguir despejar las dudas que se pueden mantener sobre un hombre al que, por otra parte, tampoco es muy habitual ver en lo más alto del podio y, sobre todo, le queda todavía mucho margen de progresión. Sin embargo, ya sobre la bocina, llegó la victoria en la séptima etapa del Dauphiné, que demostraba que Yates ha hecho muy bien los deberes y llega al Tour con buenas piernas. Además, para sorpresa de muchos, Mitchelton-Scott decidió dejar en casa a Caleb Ewan, su velocista, para centrar todos sus recursos en rodear a Yates de siete hombres de garantías poder medirse en igualdad de condiciones con Sky o Movistar.
Yates, jefe de filas del equipo australiano / © Mitchelton-Scott
Adam Yates (Mitchelton-Scott), 25 años
Días de competición: 32
Victorias: 5ª etapa Tirreno-Adriático (2.WT), 7ª etapa Critérium Dauphiné (2.WT)
Otros resultados: 2º 4ª etapa y 4º General Final Volta Comunitat Valenciana (2.1), 2º 3ª etapa y 5º General Final Tirreno-Adriático (2.WT), 2º 6ª etapa y 4º General Final Tour de California (2.WT), 2º General Final Critérium Dauphiné (2.WT)
Clasificación UCI World Tour: 17º
Puesto Tour Francia 2017: DNS
Mejor resultado Tour de Francia: 4º (2016)
Días de amarillo en el Tour de Francia: 0
Etapas Tour de Francia: 0
Mejor resultado Vuelta a España: 34º (2017)
Mejor resultado Giro de Italia: 9º (2017)
