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Euskaltel Euskadi ha vuelto a ser uno de los equipos protagonistas en la segunda etapa del Tour de Frnce, un recorrido de 156 kilómetros por carreteras sinuosas entre Bastia y Ajaccio con las cotas puntuables de Col de Bellagranajo (3ª), Col de la Serra (3ª), Col de Vizzabona (2ª) y Côte du Salario (3ª) en el camino, ésta última a 12 kilómetros de la llegada. Rubén Pérez se ha filtrado en la primera escapada del día, mientras que Gorka Izagirre formaba parte del sexteto del que ha arrancado el ganador de la etapa, Jan Bakelandts (Radioshack), nuevo maillot amarillo de la ronda gala. Juanjo Lobato no ha podido defender el maillot de la montaña, ahora en manos de Pierre Rolland.
Junto a David Veilleux, Biel Kadri y Lars Boom, Rubén Pérez ha inaugurado su casillero particular de escapadas. En sus seis Tours, Rubén no ha bajado del podio de los ciclistas que más kilómetros han acumulado en fuga en cada una de las ediciones. El de Zaldibar conjuga fuerza e inteligencia para filtrarse en las aventuras, algo nada fácil en una carrera de la competitividad, pelea y nivel del Tour. Una lástima que Française des Jeux nunca les haya dejado soñar con algo más que el propio protagonismo de la cabalgada, ya que nunca han abierto un margen superior a los dos minutos. En esas condiciones, aspirar al triunfo era una quimera. Veilleux y sobre todo Kadri lo han intentado, pero su esfuerzo ha sido en vano.
Sin fuga, la carrera llegó relativamente agrupada a la Côte du Salario, un kilómetro de ascensión al 9% de desnivel medio. Un muro en que incluso Chris Fromme lanzó un ataque y añadió aún más tensión al desarrollo de la carrera. Sin embargo, ha sido en el descenso donde se ha gestado el grupo que ha aspirado al triunfo. Al ataque de Chavanel han respondido Bakelants, Fuglsang, Flecha, Mori y un valiente Gorka Izagirre. El mayor de los hermanos de Ormaiztegi ha mostrado un envidiable punto de forma que le ha valido para estar en el grupo de elegidos que se ha jugado el triunfo.
En 2012 ya destacó en estas lides en el Tour, formando parte de escapadas de muchos quilates y logrando unas destacadas 3ª y 5ª plaza. En esta edición ha vuelto a exhibir su instinto, pero Bakelandts se ha mostrado como el más fuerte y astuto y se ha llevado el triunfo, con un segundo de ventaja sobre un pelotón comandado por Sagan, que ha ido atrapando al resto de fugados en los últimos mil metros.
