Durante la práctica totalidad de los 139 kilómetros de la primera etapa de la Vuelta a Burgos 2013, con inicio en la capital y llegada en el duro repecho del Castillo, Movistar Team asumió el mando de una carrera liderada casi desde el inicio por una fuga de seis hombres a la que los corredores de la escuadra telefónica nunca concedieron más de tres minutos de margen gracias al empuje de los Gutiérrez, Szmyd o Jesús Herrada al frente del grupo.
La labor de control del equipo dirigido por José Luis Arrieta -envuelto sin consecuencias con José Herrada en la primera de las dos caídas que cortaron el pelotón durante la jornada- surtió efecto en el primer paso por el mirador de la ciudad burgalesa y en el llano posterior, en el que los dos hermanos Herrada, así como Rubén Plaza, se filtraron en las diferentes tentativas que buscaban romper el final.
Sin embargo, la enorme velocidad en el pelotón en la aproximación al segundo ascenso provocó que Nairo Quintana quedase cerrado y perdiese posiciones, lo que le privó de cualquier opción de disputar el triunfo. Giovanni Visconti (11º) acabaría siendo el primer Movistar Team, dando tiempo a un pelotón a 8″ del ganador y primer líder Simone Ponzi (AST). Mañana jueves, segundo final en alto de la carrera con la llegada a la ciudad romana de Clunia (3ª), tras 157 km que arrancarán en Roa de Duero, como informa el equipo telefónico.