Un juez de Texas podría obligar a Lance Armstrong a ofrecer su primer testimonio bajo juramento sobre su dopaje, al ordenar al ciclista responder preguntas sobre su uso de sustancias para mejorar el rendimiento.
La compañía Acceptance Insurance Holding, de Nebraska, pidió la información como parte de su demanda para recuperar tres millones de dólares en bonificaciones que pagó a Armstrong entre 1999 y 2001. Un juez no quiso desestimar el caso
Acceptance intenta demostrar que Armstrong conspiró para encubrir sus actos y cometer fraude. Quiere saber cuándo varios de los socios personales y comerciales de Armstrong —incluyendo su ex esposa Kristin Armstrong, dirigentes de equipos, los abogados del ciclista y el presidente de la UCI, Pat McQuaid— se enteraron de su dopaje.
Los abogados de Armstrong refutaron esos pedidos en documentos judiciales, argumentando que el ciclista ya admitió haberse dopado y que Acceptance está «buscando cualquier cosa… de forma hostigadora y maliciosa» para «convertir el dopaje de Armstrong en un espectáculo».