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En una entrevista promocional publicada por el principal patrocinador de su nuevo equipo, Mathieu van der Poel analiza la importancia que para él tiene combinar las tres disciplinas en las que compite. Asegura que, para los entrenamientos, la que más disfruta es la bici de montaña, aunque esa variedad de modalidades le ayuda a no aburrirse.
En cuanto a su campaña de 2020, el campeón del mundo de ciclocross considera que “voy a tener una temporada muy ocupada porque combino tres disciplinas como son la ruta, el BTT y el ciclocross. Ahora mismo estoy centrado en el ciclocross, luego lo haré en la ruta y después saltaré sobre la bici de montaña”.
En un año con tantos compromisos, el neerlandés no duda en asegurar que “mis objetivos para la temporada son, especialmente, los Juegos Olímpicos de BTT, pero también algunas clásicas que haré por primera vez, algo que es muy ilusionante”.
En cuanto a su campaña clasicómana Van der Poel explica que este 2020 introducirá novedades que le ilusionan de forma especial. “Sobre todo, algunas carreras en Italia que no ha hecho nunca. Si todo es normal, correré la Strade Bianche y la Milán-Sanremo. Son carreras que me encantaba ver en la televisión cuando era niño, así que estoy ansioso por poder correrlas. Además, la París-Roubaix también es una carrera en la que debutaré y eso habla por sí mismo. Quiero hacerlo lo mejor posible”.
El corredor de Alpecin-Fenix sigue mostrándose encantado por poder combinar las tres principales disciplinas del ciclismo ya que “para mí, es natural combinar las tres disciplinas. Me gusta esa diversidad. Puedo cambiar de disciplina cuando quiero y eso hace que no me aburra”.
En cuanto a la compatibilidad de sus objetivos con los de su compañero de equipo Tim Merlier, actual campeón de Bélgica, considera que no deberían surgir problemas ya que “Tim y yo somos corredores distintos. Él es más sprinter. Es muy rápido en las llegadas. Si yo quiero ganar una clásica tengo que atacar más lejos que él, mientras que Tim puede esperar y tratar de ganar en el sprint”.
En el plano personal, Van der Poel repasa en esta entrevista la influencia familiar que le ha llevado a elegir el ciclismo como su profesión, aunque reconoce que “soy un gran aficionado al deporte y he practicado otras disciplinas cuando era un niño. Por ello, disfruto viendo todo tipo de deportes en televisión, pero cuando hay ciclismo siempre lo veo”.
Conocidos son sus piques con su padre, Adrie van der Poel, aunque reconoce que ya son algo del pasado. “Ya no compito contra mi padre. Normalmente, debo ser mejor que él y si no lo soy quiere decir que tengo un gran problema”
En cuanto a sus entrenamientos, esos que le han llevado a ser uno de los mejores corredores del panorama internacional, Van der Poel explica que “mi entrenamiento favorito es salir con la bici de montaña. Lo más duro para mi son las series. El ejercicio más duro que puedo hacer son las series 40/20, que son 40 segundos al máximo y 26 segundos a un ritmo más relajado”
