Tras su vuelta a los circuitos en Ruddervoorde, donde se llevó una aplastante victoria, Mathieu van der Poel anuncia importantes cambios en su programa invernal respecto a temporadas pasadas. Pese a lo que inicialmente podría deducirse de su deseo de centrarse cada vez más en sus objetivos ruteros, incluida su posible debut en pruebas de tres semanas en la Vuelta a España, Van der Poel no sacrificará días de competición… sino que descansará menos que otros años.
Después de retrasar su arranque de campaña, el vigente campeón del mundo de la disciplina invernal tiene previstos dos meses cargados de competiciones. Así, durante el mes de noviembre correrá, contando la ya mencionada puntuable para el Superprestigio, ocho carreras. La gran novedad, en cualquier caso, llegará en el mes de diciembre cuando el neerlandés sacrificará su tradicional concentración en España y el descanso activo que suele tomarse en Navidad. “Quiero correrlo todo”, decía el propio Van der Poel en declaraciones a Wielerflits.
Cabe recordar que cuando se anunció el programa invernal de Van der Poel, quedó claro que su principal objetivo para este invierno será un nuevo maillot arcoíris. Por ello, y dado que su primera aparición en los circuitos se ha retrasado hasta noviembre, el neerlandés afrontará dos meses muy intensos para levantar algo el pie en enero pensando ya en la cita mundialista.
“A mediados de enero sí tengo prevista una concentración específica para el Mundial y las clásicas de primavera. Eso supone que no estaré en la Copa del Mundo de Nommay y probablemente tampoco en Hoogerheide”. Sabedor del mazazo que para la afición neerlandesa puede tener esa última afirmación, el propio corredor se corregía inmediatamente y explicaba que “Hoogerheide es una semana antes del Mundia, así que quizás sí pueda entrar en el programa”.