Alexandre Vinokourov, mánager del Astana, está sumido en un túnel sin iluminar y sin salida aparente. El escándalo de dopaje que asola a su estructura, tanto al equipo World Tour como al continental -la UCI dice que son «estructuras diferentes»- ha obligado al kazajo a tomar la tangente y decidir la suspensión -avalada por la Federación Kazaja– del conjunto filial indefinidamente tras los positivos de Ylia Davidenok, Viktor Okishev y, ayer miércoles, el de Artur Fedosseyev. Sin embargo, ninguna medida toma contra la primera escuadra, en cuyas filas se produjeron los positivos por EPO de los hermanos Iglinskiy, Valentin -ya suspendido 4 años por la UCI- y Maxim, exganador de la Lieja-Bastoña-Lieja y componente del nueve del Tour de Francia, ganado por su jefe de filas Vincenzo Nibali. La otra cabeza «guillotinada» ha sido la de Dmitri Sedoun, mánager del conjunto B.
«Estos jóvenes corredores están locos», se atreve a decir el vigente campeón olímpico de fondo en carretera a declaraciones a La Gazzetta dello Sport en la concentración del Astana que está realizando en Italia, previa a la que harán en la localidad alicantina de Calpe. «No entienden que el dopaje no tiene cabida en el deporte de la bicicleta. Pero esto también es una señal de nuestra unión. Como muchas veces hemos dicho se necesita que la federación kazaja haga más y más estrictos controles. Tienen todo nuestro apoyo y ya lo hemos demostrado», dice Vinokourov.
Y se desmarca de una formación de la que sí tiene poder para suspenderla. «La gente tiene que entender que hay algo más que no tiene nada que ver con este negocio. La única cosa que tenemos en común son los maillots y el nombre». Los hermanos Iglinskiy parecen ahora desaparecidos -sin diagnóstico mental de su exjefe- y, al parecer, sin protagonismo para evitar la posible retirada de la licencia por parte de la comisión de la UCI. Un discurso incoherente e interesado acorde a la complicada situación por la que atraviesa su equipo. El presidente de la UCI, Brian Cookson, en declaraciones a Ciclo 21, ya avisó de que los positivos de la sociedad asiática no se podían tolerar ni permitir.
Nibali por su parte, reitera que el equipo filial está separado del equipo World Tour. «Creo que todo el mundo entiende ahora que el equipo continental no tiene nada que ver con nosotros. Es una estructura y unos corredores de los que yo ni siquiera sabía de su existencia», dice. A pesar de las palabras del italiano, ambos equipos compartieron rueda de prensa previa en el pasado Tour de Almaty, la prueba de un día celebrada en Kazajistán, donde coincidieron los dos conjuntos.
El quinto y ¿último positivo?
Unas consecuencias que vienen por el nada menos que quinto positivo en sus filas. Artur Fedosseyev es el ¿último? corredor de la estructura Astana que ha dado positivo esta temporada. El kazajo de 20 años pasó control en la última etapa del Tour de l’Ain en Francia el pasado 16 de agosto y ha dado positivo con anabolizantes andrógenos esteroides según ha comunicado oficialmente la UCI en su página web.
Como en los casos anteriores, Fedosseyev se encuentra suspendido temporalmente por la UCI a la espera del resultado del contraanálisis -si lo pide el corredor-, tras el que se le abrirá el preceptivo expediente para determinar su sanción.
Como en el caso de sus compañeros en el Astana continental, Fedosseyev tenía en su organismo las mismas sustancias prohibidas que Ilya Davidenok y Viktor Okishev, los anteriores casos de la estructura que dirige el campeón olímpico Alexandr Vinokourov, suspendido en su día dos años tras dar positivo en un Tour de Francia por una autotransfusión. Los anteriores fueron los de los hermanos Iglinskiy, Valentin y Maxim, uno de los ocho integrantes que ayudó a Nibali a dominar en el Tour de Francia.
El corredor asiático ha cumplido en 2014 su primera campaña en el filial del Astana del UCI World Tour, después de ser aprendiz desde agosto de 2013. Su mejor actuación fue la segunda plaza en el Trofeo Bastianelli en Italia (1.2 UCI) y un sexto en la 2ª etapa del Tour de l’Ain, días antes de su control irregular. También fue décimo en el Campeonato de Kazajistán de fondo en carretera. Posteriormente participó en el Tour del Porvenir -donde Davydenok dio positivo-, acabando en la 39ª plaza de la general. Números que no le sirvieron para estar en los Campeonatos del Mundo sub-23 de Ponferrada.
Fedosseyev compartió ruta con Vincenzo Nibali en dos competiciones. Primero en el GP Prato vistiendo los colores de su país -el siciliano lo hizo con Italia- y posteriormente en el Tour de Almaty, en Kazajistán, donde coincidieron ambas formaciones en la rueda de prensa previa a la carrera y ya en el día de la competición. Fue la última vez en la que el sub-23 se puso un dorsal en 2014.
Tras este nuevo caso, la licencia del Astana -de ambas escuadras- está más en vilo que nunca. La comisión correspondiente de la UCI se halla en pleno estudio para concederlas y este nuevo golpe puede sentenciar definitivamente a un conjunto que tiene en sus filas a hombres de la calidad del ganador del Tour, Vincenzo Nibali, su compatriota Fabio Aru y los españoles Mikel Landa y Luis León Sánchez, una de las nuevas incorporaciones junto a, entre otros, Lars Boom o el colombiano Miguel Ángel López, vencedor del Tour de Porvenir. El grupo kazajo ya fue suspendido sin licencia en 2006 y 2008. La tercera puede ser inminente.