Redacción / Ciclo 21
«Le llamamos Woodsy, y nos enamoramos de él en cuanto llegó. ¿Y qué no se puede amar? Woods fue todo lo que esperábamos y mucho más. Rápidamente se convirtió en una de nuestras estrellas más brillantes, con su mentalidad ganadora y su modo de atacar, consiguió victorias y estuvo a punto muchas otras veces» dice el comunicado de prensa del Israel que confirma al canadiense residente en Girona como jefe de filas para la próxima edición del Tour de Francia. De esta forma y como ya se preveía, Chris Froome -el mejor pagado del mundo- no ha logrado su objetivo de tener la forma suficiente para optar a su quinta victoria en París e igualar así a Anquetil, Merckx, Hinault e Indurain.
El director deportivo Rik Verbrugghe explica la designación sin mencionar al británico: «Lo que pasa con Mike es que antes de unirse a nosotros, siempre fue el segundo corredor. El que trabajaba para un líder. Al unirse a Israel, le permitimos liderar, y nos demostró que es, de hecho, un líder natural. Su éxito en las clásicas, en el Tour de Romandía y en el Tour de Suiza le dieron -y nos dieron- la confianza de que puede desempeñar ese papel en la mayor carrera ciclista de todas, el Tour. Espero que luche por las victorias de etapa y que esté en la lucha por la clasificación general, como hizo en el Tour de Suiza. El objetivo principal del equipo será proteger a Woodsy y proporcionarle todo el apoyo que necesite.»
El protagonista de la noticia mostró su felicidad y responsabilidad. «Estoy realmente emocionado de representar al Israel Start-Up Nation en el Tour de Francia, especialmente en el papel de líder del equipo. He tenido la oportunidad de liderar un equipo en una gran vuelta, pero nunca en el Tour de Francia. Es un honor que me den este puesto, sobre todo teniendo en cuenta la calidad del equipo que tenemos.
Y detalla hasta dónde quiere llegar en la capital francesa. «Mis principales objetivos y prioridades son claros: primero ganar la etapa y tratar de estar arriba en la clasificación general. Queremos hacerlo bien en la general, sin duda, lo más importante para mí son las victorias de etapa. Ese es el objetivo principal. Estoy deseando asumir el papel de líder de la geneal en el equipo. Me encanta correr para ello. Es un verdadero reto y hacerlo en el Tour es más desafiante, más intenso y mucho más estresante. Pero tal y como estoy pilotando estos días, estoy preparado para el reto. Y con el equipo que tenemos, seremos una fuerza a tener en cuenta.
El americano afirma encontrarse bien preparado tras la gran ronda helvética. «Creo que estoy en un buen momento. Aprendí algunas lecciones excelentes en el Tour de Suiza que acabamos de terminar ayer, donde pude luchar por las victorias de etapa y terminé quinto en la general. Creo que vamos a utilizar esas lecciones de cara a esta Gran Vuelta. Estoy entusiasmado, creo que hay algunas oportunidades excelentes para nosotros, no sólo para mí sino para el equipo, y estoy deseando empezar en Bretaña».